Una excusa, un leve motivo es
suficiente para echar un día extra en buena compañía; lo mejor de todo es que,
alejándome de la ciudad, no tenía que conducir. Habíamos quedado a las 9 de la
mañana y fuimos algo más que puntuales; hacía fresco, pero el día apuntaba una
luz esplendente que pronosticaba un plácido día de primavera. A poco de salir
de Sevilla, paramos a desayunar en un área de servicio que tiene más de
polígono industrial desaprovechado, que de lugar de reposición y reposo en
carretera, un lugar especializado en los productos del cerdo ibérico: “para mí
tostada con manteca colorá”. De
vicio, de pecado y altas dosis de colesterol, pero una vez al año… Sólo con nombrarla se me hace presente de
nuevo el aroma y untuosidad palpables en el paladar.
Éramos cinco y ellas me
reservaron el asiento del copiloto. La autovía en esta época, con su seto
central de adelfas, está flanqueada por un estallido de color de infinitos
verdes y flores multicolores que se desparraman como por la mano generosa del
dios de los pinceles; después vendrían los pinares de Cartaya y de inmediato los
extensos mares de plástico bajo los que crecen en silencio numerosos cultivos
de fresa y frambuesa, en vecindad con extensiones de frutales, en especial por su mayoría de naranjos jóvenes a plena
producción. Una parada para reportar y seguimos camino hacia Portugal.
Vila Real de Santo António, A
ciudades as compras, es la hermana gemela de Ayamonte, separada por las
márgenes del río Guadiana como frontera natural a la altura de la
desembocadura. Ciudad de las compras que se asemeja, por mor de la situación
económica presente y un IVA del 23%, casi a una ciudad fantasma con mayor
número de dependientes en los comercios que personas en disposición de comprar.
Manolo consiguió aparcar en la
explanada del mercado, una plaza con numerosos puestos, algunos vacíos, pero
muy bien abastecida. El mercado suele ser el pulso de una ciudad y a esa
temprana hora no eran muchas las personas que se agolpaban en los puestos de
frutas y verduras y en los llamativos buenos géneros del pescado. Los precios
son un poco más bajos que en España y la calidad exquisita que invitan a
arramplar con todos el pescado. Entre las cosas llamativas, señoras que
esperaban a los clientes en sus puestos de fruta y verdura desgranando habas y
guisantes que ofrecían ya pelados en bolsitas de plástico transparente, listo
para ser usados. También puestos de artesanía de la caña, el junco u otras
fibras naturales, como estampas arrancadas de otros tiempos anteriores a las
bolsas de plástico.
Algunos paseantes, pocos en las
tiendas, y casi todos hablando español. El idioma no es frontera en Vila Real,
donde el café es un sorbo exquisito con un aroma e intensidad inusitada. Ellas
se quedaron en la calle comercial, donde los productos salen de las tiendas en
busca de los clientes, y nosotros, los que en el comercio somos comparsa, nos
dedicamos a pasear y a conversar de esto y aquello, de lo divino y lo humano.
En la dársena no había actividad, sólo barcos atracados; el río es un embalse
cuando la pleamar se confunde con el Atlántico, y por los resquicios de la
conversación, extendiendo la mirada hacia el otro lado de la mar océano, el
recuerdo afectuoso de Luján Fraix, María del Carmen Nazer, mi entrañable
venezolana Ema, Humberto, Nidael Doré… De frente, más allá de los veleros y
embarcaciones a motor, el agua semisalada y Ayamonte al otro lado de la
anchurosa lengua de agua. A la hora convenida, todos al Restaurante Joaquim Gomes, para dar cuenta de una suculenta lubina
que parecía mascullar susurros y leyendas de encantadoras sirenas.
Que envidia, no en si las compras sino el paseo por Vila Real . Hace mucho que no vamos a Portugal ni por abajo , ni por el centro ni por arriba y lo echo de menos.
ResponderEliminarMe alegro de que hayáis pasado un buen día.
Un abrazo
Yo no participé en comprar, que también hubo alguna, pero pasamos un día inolvidable en magnífica compañía.
EliminarBesos
¡Cómo hubiera deseado estar en "La ciudad de las compras" !Me alegro que lo hayas pasado bien y muchas, muchas gracias por el recuerdo.
ResponderEliminar¡LINDO FIN DE SEMANA 1
Besos de luz.
Lo mejor de todo la compañía. Buen pescado, buen café y mejores amigos.
EliminarBesos.
El verano pasado estuvimos allí.Me encantaba cruzar ese puente que nos separaba de Portugal y entrar en un país diferente. ¿Has probado a desayunar? Pues las tostadas son totalmente diferentes a las nuestras.
ResponderEliminarMe alegro de que hayáis pasado un día diferente.
Mil besos
Las tostadas en Vila Real son espectaculares, tienes toda la razón.
EliminarBesos.
Me has puesto los dientes largo y ganas de volver a visitar Portugal, por desgracia acabo de escuchar noticias que les ha dado su presidente esta noche pasada y, como las que aquí, no son nada agradables, son nuevos recortes que los hará algo más pobres.
ResponderEliminarUn abrazo
PD/ lo de las tostadas con manteca colorá aún las recuerdo de mi etapa sevillana, las tomaba la gente con gula, nunca me he decidido a probarlas y la verdad es que del cerdo me como hasta el morro, pero desayunar con manteca del Sr. cochino no he tenido costumbre, mi manteca en todo caso ha sido la de vaca.
Allí están pagando el 23% de IVA, a pesar de lo cual no me pareció cara la comida, sino más asequible que en España. Se veía todo un poco desolado frente al gentío de otras veces en las tiendas. En cuanto a la manteca, no sabes lo que te pierdes.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco, vaya día mas bonito que has pasado y como nos dejas con los dientes mas largos que vamos hacer surcos en el suelo con ellos:), ya que al ver esa lubina y tal como la describes que envidia:), hace años estuve por Extremadura y un día también pasamos a Portugal, pase un día magnifico y del que guardo gratos recuerdos, también comimos el típico bacalao con patatas y que rico que estaba, me alegro que lo pasases también.
ResponderEliminarBesos.
En esta ocasión no comí bacalao, pero suele ser el plato más habitual y lo hacen buenísimo de de muy variadas formas.
EliminarBesos
Amigo la próxima vez, a ver si cojo en tu maleta. Soy pequeño, pero eso sí,
ResponderEliminarinvitado como a reventar.
Que bien me ha sabido tu viaje, (que envidia).
Un fuerte abrazo.
Nada de envidia, cuando quieras vienes por Sevilla y nos hacemos una escapada.
EliminarUn abrazo.
En los viajes a otros lugares más que los edificios y monumentos (aunque también), lo que más me ha interesado siempre es, las costumbres de sus gentes, su cultura, y el discurrir de la vida diaria, independientemente de la mirada turística. Eso es lo que he visto y leído a través de tus ojos. Leído con gran interés, desde un principio, en esta como en tantas otras publicaciones de tus viajes, que tan estupendamente sabes contar amigo Francisco.
ResponderEliminarUn abrazo.
La plaza de abastos dice mucho de una ciudad, y aunque no íbamos a comprar allí nada, nos dimos una vuelta que resultó muy amena.
Eliminar<un abrazo, José.
Hola Paco. Buen reportaje. Como siempre has puesto el alma en lo que nos cuentas. Dan ganas de estar por ahí para ver a las señoras desgranando habas y guisantes. Fue un buen paseo, de ello podemos estar seguros.
ResponderEliminarÁngel
Muchas gracias, esos son los ojos con los que me miras, Ángel.
EliminarUn abrazo.
El 29 de junio del año pasado, en una entrada tuya con el nombre de Vila Real de Santo Antonio, comenté: Para mí, Vila Real de Santo Antonio es la revolución de los claveles, pues allí fue donde los españoles probamos la libertad que en nuestro país no existía. Hoy, a pesar de que el tema es muy distinto, mis recuerdos van en la misma línea.
ResponderEliminarNo sólo me lees, sino que guardas memoria. Curiosamente hace días fue el aniversario y ayer me pasé todo en tiempo recordando "Grândola, Vila Morena".
EliminarUn abrazo.
En mis tiempos viajeros siempre dejé a Portugal a un lado porque "como está ahí al lado iré cualquier día", mis tiempos viajeros pasaron y me quedé sin conocer Portugal.
ResponderEliminarEso es como quien guarda una prenda para una ocasión especial, olvidando que lo especial es el momento presente, porque hay muchas posibilidades de que no llegue nunca el mañana.
EliminarBesos.
Me encantan estos viajes en los que sólo toca ver mercados, tiendas y objetos variopintos para rematar la jornada delante de una prueba gastronómica del lugar.
ResponderEliminarPor cierto, ya podías haber comprado un canastito de ésos tan monos.
Un abrazo Fco.
Pues te prometo que luego me arrepentí de no haberlo comprado. La próxima será.
EliminarBesos.
Paco me gusta tu post, es viajero y cultural.
ResponderEliminarGracias por dar a conocer de tu mano un lugar con encanto, cerca de nuestra tierra andaluza,hay más artesanales y buena comida...
Un abrazo fraternal de MA.
Sí, MA, es ciertamente un lugar con encanto. He ido muchas veces, pero siempre le saco sabor.
EliminarBesos.
Me gustan tus diarios de viaje. Estuve en lisboa y Oporto hace poquito y lo unico que siento en el alma es que ese pais parezca el porvenir de EspaNa en cuanto a recortes se refiere. Pobreza que remontaremos de mala forma. Besos.
ResponderEliminarAhora somos muchos los países en el barco de la desgracias; esperemos que podamos llegar a puerto.
EliminarBesos.
Vaya, ya veo que lo habéis pasado fenomenal, es genial jejejeje... Venía a disculparme por no haberme pasado por tu blog, estoy temporalmente fuera de servicio jejejeje, el médico me obliga a guardar reposo, y el ordenador no es reposo, eso me dijo, solo que me he escapado un poquito para dar señales de vida. Muchas gracias por tus comentarios en mi blog, espero poder volver pronto.
ResponderEliminarPues es cierto, Tamara, el ordenador es incompatible con el descanso, así que cuídate un poco. Y si necesitas un guardián a la cabecera de tu cama, no tienes más que avisarme.
EliminarBesos.
Qué agradable paseíto por Portugal. Hace tiempo que no voy, y ya lo extraño. Tampoco Portugal vive sus mejores tiempos ahora.
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Bisous
Vila Real es una ciudad fronteriza que siempre vivió de cara al comercio y sus visitantes, pero también están notando seriamente la crisis: las tiendas, los restaurantes... Al parecer es la cosecha propia de este tiempo.
EliminarBisous.
Buen lugar Portugal para hacer compras y comer bacalao. Y lo de la "manteca colorá"... te comprendo perfectamente. Un pecado gastronómico que hay que cometer aunque sea de tarde en tarde, con ese pan chorreando y el café caliente. Una maravilla.
ResponderEliminarUn saludo.
La comida es muy buena y la gran especialidad los bacalaos y el café también es extraordinario. ¡Quedas invitado!
EliminarUn abrazo.
¡ Que bien , Francisco! no sabes lo que me alegro que hayas pasado un día tan genial y bonito ! y poder pasear por esas tiendas , comer ese pescado tan buenooooo y sobre todo el famoso bacalao con patatas. Yo tenía muchas ganas de conocer Portugal porque la hermana de Luis vivía allí y me invitó muchas veces , pensábamos ir en la Navidad de 2010 pero... justamente murió ese mismo año el día de mi Santo , fíjate . Y ya no he ido , es decir ya no conozco Portugal y además es que ahora ni me apetece , mi ilusión era ir con él . Sus sobrinos viven allí.
ResponderEliminarGracias por este paseo tan bonito y por compartirlo con nosotros.
Hay que aprovechar las oportunidades, pues estas pasan y por lo general no vuelven. Ojalá que un día te animes y puedas disfrutarlo.
EliminarBesos.
Buenas tardes Francisco !jaja cometiendo pecadillos eh!Pues esos son perdonados.
ResponderEliminarGracias por darnos ese viaje a Portugal, hace más de 20 años que lo recorrí casi todo con una autocarabana que alquilé. Visité Fátima,lugar que me encantó por su sincera fe y en Lisboa, visité el convento de M.Carmelitas donde estaba Sor.Lucía.
Espero que las carreteras hayan mejorado, pues eran casi casi para cabras.
Con ternura le dejo un beso
Sor.Cecilia
No es lo que entra por la boca, sino lo que sale del corazón lo que nos deja marca. Las carreteras sí que han mejorado bastante y hasta hay una red de autovías.
EliminarReciba también mi ternura. Besos.
Una vez al año no hace daño. estupenda excursión y mejor yantar. Además el tiempo acompañaba que también hace que se disfrute el doble.
ResponderEliminarQue repitas muchas veces.
Bss
Muchas gracias, Katy, seguiré tu consejo.
EliminarBesos.
A divertirse, que la vida son dos días.
ResponderEliminarUn abrazo
Pues sí, Antorelo, tampoco es como para volverse locos, pero un día así entre amigos es una auténtica gozada.
EliminarUn abrazo.
Nunca he tenido la oportunidad de viajar a Portugal.. sin embargo .. curiosamente .. Mariam ( la que canta el fado ) es de allí .. y creo que su madre vive por la zona que describes .. En cuanto podamos queremos ir a su casa ( ya te contaré si sucede ) .. Y si es así.. pasaremos por Sevilla ..
ResponderEliminar( Sueños ) pero quién sabe? .. al menos está en proyecto!!
Gracias por el paseo querido amigo .. Un cálido abrazo ( dos siempre )
Me alegro que proyectes ese viaje, sobre todo que pienses hacer escala en Sevilla.
EliminarBesos
Hola Francisco, muy bonito como cuentas esa salida por Portugal.
ResponderEliminarMe alegro que lo hayas pasado tan bonito y hayas disfrutado de los placeres gastronómicos.
Saludos y besos
Muchas gracias, Isa, por alegrarte de mi alegría.
EliminarBesos.
Muy amena la lectura de esta salida a Portugal. Quizás porque también uno se ve reflejada en ella.
ResponderEliminarCompras y buena comida, sin prisas.
Saludos.
Casi nada es exclusivo, sino que todos tenemos parcelas comunes en las que convivimos. Gracias por llegar y comentar.
EliminarSaludos.
Una gozada disfrutar de tu visión de la tierra de nuestros vecinos...Muy agradable ese paseo,que has compartido,Francisco.
ResponderEliminarMi gratitud y mi abrazo siempre,amigo.
M.Jesús
Me alegro que así te haya parecido, María Jesús. Me encantaría compartir un café portugués contigo o una comida, además de las letras.
EliminarBesos.
Qué paseo divertido! Me encantan los mercados y ferias tradicionales. Unas fotos preciosas y un plato exquisito para que se haga agua la boca. Gracias por tan buen relato. Besos.
ResponderEliminarEs muy satisfactorio compartir y que te reciban tan bien como lo has hecho conmigo.
EliminarUn abrazo.
Qué delicia de paseo, con todo el tiempo para disfrutar desde los más pequeños detalles.
ResponderEliminarAbrazo.
Las ciudades fronterizas siempre tienen un atractivo añadido.
EliminarBesos.