Noble
arquitectura tu mirada,
la
derrochada en la noche de los cielos toscos.
MARITXÉ ABAD I BUENO
Centelleante,
luminosa como estrella fugaz
que corretea el firmamento
de un lugar a otro,
con su mirada electrizante
y cubriendo de versos y voz
cálida
la anchurosa franja que va
desde la huerta valenciana
a la ciudad nazarena.
Ella es un permanente
amanecer,
como retazos de otoño en primavera
que no se eclipsan
con singladuras y mejunjes literarios;
ella es de un ángel, un
volcán en erupción,
una princesita que sueña
y juega a ser mayor; que
sueña
y ensueña. Sueña y fantasea con
letras
en lugar de hacerlo con
muñecas.
No importa que me roben el tiempo... No importa la distancia... Importa tu decir que derroca toda lejanía gélida,importa tu sentir que aproxima latidos, aproxima cariños de amistad que consolidan los pilares qu3 compartimos. Gracias, gracias, gracias, estimado Francisco.
ResponderEliminarUn beso gordo.����
Importa cultivar la amistad y dar calor, para poder recibirlo en los momentos de deshielo, Zaida.
EliminarUn fuerte abrazo.
Poema homenaje a una amiga tuya poeta.
ResponderEliminarLo que evidencia la grandeza que tiene lugar cuando se dan unidas comunicación y empatía.
Un abrazo, Paco.
En esta aldea global, o ponemos de nuestra parte para hacerla habitable, o nos empachamos de soledad.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
Preciosos versos
ResponderEliminarMIR gracias, María del Mar.
EliminarUn abrazo.
Hermoso poema.Saludos
ResponderEliminarMuchísimas gracias, Charo.
EliminarUn abrazo.