Las
migas de pan son ahora
escarcha
sobre mi mesa.
PEPI BOBIS REINOSO
El zaguán de tu casa,
estrellada sonrisa,
anchurosa como la mar en
calma;
la calidez salina del
abrazo,
que rúbrica, certifica,
ampara,
la generosa acogida de tu
ámbito,
pleamar que repliega las
arenas
y constriñe a mínimos la
playa.
En tu Jardín de los instantes
yo hago morada
sin horarios, sin prisas,
columpiándome en la calma,
bogando todo mi ser por tus
palabras
y descifrando imágenes
que parecen encalladas
y son festín de olas y algas,
orgías de plata nacaradas;
luego, sobre mi escritorio,
morfemas, retazos de
palabras,
música hilvanada a los
vientos:
las migas que quedaron en tus
labios,
son ahora de escarcha.
Me imagino que se trata de un homenaje a una persona tras la lectura de su poemario. Que lo disfrutes.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Los buenos lectores siempre dan en el clavo.
EliminarUn fuerte abrazo, Cayetano.
Magnífico Francisco! Jamás hubiera pensado recibir este inmenso regalo. Me emocionas y me dejas sin palabras.
ResponderEliminarMi gratitud y la mejor de mis sonrisas.
Ya me siento recompensado, pues tu sonrisa es el umbral y la puerta abierta de tu casa.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hermoso poema a la amiga.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo, por tu modo de calificarlo.
EliminarUn abrazo.