Desde la distancia,
sombras y hamacas
son líneas paralelas
─de tres o cuatro en fondo─
como un batallón de ejército
de maniobra estática
que se alinea
en estrechas proporciones
de impúdica cercanía.
Arde la arena,
arden los cuerpos
ceñidos en mínimos textiles
que quieren estallar
embadurnados de cremas
que ennegrecen aceitosamente.
La comunicación es pública o
inexistente,
pero nunca privada
en el corsé
en el que estamos formados;
en medio de tanta conexión
desconectada:
unos leen, otros tapan sus
oídos
con auriculares misteriosos
que hablan, cantan o callan
y otros vagan sus miradas
en la abstracción del
horizonte
o en la lejanía de sus
pensamientos;
quienes pronuncian
─por lo general sin impudicias─
solean sus almas a los
cuatro vientos
con la posible sensación
de estar aislados.
Entre la alineación y la
alienación,
una ene de nada
que te saca de la fila
y te hace perder marcialmente
el paso.
Bueno, pero tu poesía pisa firme.
ResponderEliminarUn beso.
Firme y marcial, cuello erguido y barbilla recogida, mirada al frente.
EliminarUn beso azul.
Por eso mi sueño en materia de descanso es sencillamente estar en un playa de una isla casi desierta en Brasil o centro américa, y tan desnudo como esos cinco minutos que me concedieron después de nacer y que no se han podido repetir. Abrazos.
ResponderEliminarLa soledad es una utopía que sólo se logra en la mente. Uno se plantea un viaje exótico a Cancún, y hasta el hotel pertenece a una cadena española. La soledad en el presente, Vicente, es un interiorismo y nada más.
EliminarUn abrazo.
Y la mejor la primera línea de playa donde la brisa marina mitiga el calor.
ResponderEliminarUn beso
Sí, Tracy, pero la última fila tiene más cerca el chiringuito.
EliminarBesos.
Buen juego de palabras, de todos modos ¿no es preferible alienarse en la playa en vacaciones, donde hay un pequeño soplo de libertad, que en la ciudad donde te atacan por todos los lados desde que te levantas hasta que te acuestas?.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por supuesto que sí; pero no olvides que la playa es simplemente un paréntesis, que la ciudad sigue mascullando y reglamentando aquello que nos afecta y hasta nos puede dejar al borde del camino.
EliminarUn abrazo.
Como en tiempos dela mili: formación uniforme... ¡ar!
ResponderEliminarUn saludo... ¡ar!
¡Deeeeescansen!
Un tiempo para olvidar. Verano del 69, Amstrong hollando la luna y yo durmiendo en un jergón con chinches. ¡Descansen... ar!
EliminarUn abrazo.
Las playas muy conocidas tienen esa característica. Todos encimados. Me gustan los lugares solitarios , sólo que a veces esos lugares son difíciles de encontrar o algunos sólo para ricos. . Ay, Dios el juego de esas dos palabras es muy peligroso. alineación - alienación. Apapachos.
ResponderEliminarY tan difíciles, María del Carmen. Como que ya no quedan apenas espacios naturales que no hayan sido sometidos por la mano del hombre.
EliminarApapachos.
Qué broche más certero con tus versos finales, esa "ene" que navega entre la fina línea y el alienamiento.
ResponderEliminarUn besazo Francisco y gracias por llegar en Setiembre, como el cole. :)
Gracias a ti, Laura, por tu sutileza.
EliminarBesos.
No me gustan las playas repletas de gente y tampoco las alineaciones , eso de alinearse me suena a orden estricta , es como en aquella época en que nos ponian en fila después del recreo y luego nos decían " Alineaciónnnnnnnn " . En la playa suelen observarse muchas muchas cosas curiosas ¿verdad ? es como que a pesar de tanta gente hay mucha desconexión y cada cual se conecta como puede o con lo que le gusta.
ResponderEliminarUn gran Poema, Francisco y muy real . Un abrazo Rondeño
Yo destaco de la playa dos actitudes bien marcadas: la desconexión de cada uno a lo suyo en la proximidad, y las las voces impúdicas de quienes no les importa hacer partícipes de sus interioridades a toda la cercana vecindad. Gracias, muchas gracias, Charo.
EliminarBesos.
Malo si lo pierdes y malo si no, dicen algunos.
ResponderEliminarYo prefiero perderlo y salir a alinearme, que no a alienarme, cuando se rompen filas.
Besos.
Los que hicimos la mili sabemos la liberación que representa la voz de ¡rompan filas! Aquí se trata de otra alienación o alineación; en el fondo, la poesía es jugar a engarzar palabras.
EliminarBesos.
Tiene razón, D. Francisco...¡digo yo que en nada se parece a una playa desierta por donde pasea alguien leyendo un libro...con un perrito siguiendo sus pasos, verdad?.. Mi cordial saludo.
ResponderEliminarSin duda alguna, pero esta playa que presento, tan común en el Mediterráneo, es bien parecida a lo que he tratado de describir.
EliminarUn beso.
Como los girasoles, los turistas alienados dirigen sus cuerpos al sol con la obsesiva idea de achicharrarse. A veces me pregunto qué demonio pondría d emoda esa costumbre nociva. Un baño sí, una hora bueno, a lo sumo dos antes de la doce o después de las seis, y luego a casa, a casa, a tomarse un refresco a la sombra benéfica.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias, Carmen, muchísimas gracias por tu estupendo comentario.
EliminarBesos.
Hola Francisco, ufffffffffffffff sinceramente si ahí falta hasta el el oxigeno.
ResponderEliminarNunca me iría de vacaciones para estar así alineados. Me gusta más mi playa de la ducha. Ahí solo ella y yo sabemos de nuestras intimidades. Eso sí el tiempo justo bajo el agua. Me agobian las aglomeraciones y más si estoy desnuda o semi desnuda.
No aguanto estar bajo el sol horas y horas, es aburrido. Respeto que haya personas que puedan pasarse 10, 15 o 30 días así, pero eso para mi no son vacaciones.
El poema es el puro retrato de la imagen. Muy bueno.
Saludos y un abrazo
Lo más incómodo de todo, además de achichararse al sol, es la falta de intimidad, pero todo el mundo está en la misma onda. Yo actúo de otra forma.
EliminarBesos.
Realmente, esa arena que arde y ese sol que quema...achicharra la piel y el cerebro...Toda esa gente en filas anónimas nos habla de la pobreza de espíritu y del triunfo de la apariencia y de la inconsistenica...Una buena crítica Francisco...
ResponderEliminarMi abrazo y mi ánimo siempre.
M.Jesús
También tengo que decir que hay gente que aprovecha el tiempo leyendo incansablemente. Por mi parte, más de un poema ha sido escrito en ese ambiente y lugar. Suelo sentarme a la sombra, un baño de cuando en cuando, lectura y un bloc en el que hacer anotaciones.
EliminarBesos.