Inaugurando marzo,
ha nevado copioso blancor sobre el naranjo,
encendido de anegando aroma
las calles y plazuelas de Sevilla.
Amanece con capota emplomada
bajo la capa de lo anodino.
Reina un profundo silencio
bajo el murmullo de las prisas de lunes.
Todos van cabizbajos a sus quehaceres
en un trepidar de ensimismamiento,
como en un sueño no interrumpido.
En el pórtico de una capilla
languidece la espera de un mendigo
con más mugre que esperanza;
pasa desapercibido para los viandantes
mientras el sol estrena una brecha
por entre los tules grises.
Es primavera. El vagabundo responde
con una sonrisa al sonido de las escasas monedas
que redoblan en su vaso de plástico.
Es primavera. La vida discurre sin tregua,
sin pausa. Sobre la acera, un patinete eléctrico
angosta el paso. Cada uno a lo suyo.
Parece que vuelve el invierno ante el adelanto de una primavera que no era natural.
ResponderEliminarUn abrazo.
He venido a resfriarme ahora, lo que no me sucedió en todo el invierno. Estamos locos. Y encima atemorizados con el dichoso virus con el que nos quieren meter pánico.
EliminarUn abrazo.
Ya sabes Francisco, cuando no es por una cosa. es por otra, la cuestión es tenernos acojonados.
EliminarPues como cantaban aquellos dos jovenzuelos de cuando yo lo era, "Resistiré".
Eliminar¿Ya es primavera en el C. I., por ejemplo el de la Plaza del Duque?
ResponderEliminarFeliz día, Paco.
Ahí siempre es primavera, ofertas locas, viernes negro... Siempre una excusa con la que desplumarte.
EliminarUn abrazo.
No puedes haber descrito de forma más bella el ambiente de la ciudad.
ResponderEliminarBuenos días amigo.
Es hora de desayunar y emprender una caminata.
Besos
Muchas gracias por tu palabras. Yo voy a hacer antes unos ejercicios en casa y luego salgo a andar y de paso a tomarme un café de edia mañana.
EliminarBesos.
Flor de azahar!!
ResponderEliminarNostalgia de lo que no se tiene.
Ese naranjo está a escasos metros de mi casa. Ayer tomé la foto cuando volvíamos y luego vino la idea del poema.
EliminarUn abrazo
Hola Francisco. Qué bonito que nieve y que embellezca ese naranjo con flores. Este año ha sido escasa la nieve. Que te mejores y pase pronto.
ResponderEliminarAbrazos
La nieve es una metáfora. En Sevilla ha nevado en muy escasas ocasiones a lo largo de los años; pero es muy perfumada la nieve de los naranjos en primavera, Isa.
EliminarAbrazos.
Llegó marzo haciendo honor al refrán pues está haciendo un fortísimo viento.Saludos
ResponderEliminarMarzo ventoso, reza el refranero. Aquí no ha sido muy fuerte el viento, pero sí grande los contrastes de temperatura de la mañana a la noche.
EliminarUn abrazo.
Eso... ca uno a lo suyo, ¿Y Dios a lo de tós?
ResponderEliminarEsa es la identidad común del ser humano, Tracy, "ca uno a lo suyo".
EliminarLlego Marzo con nieve. Asi de loco es este mes. Aquí hizo un viento horrible. Saludos amigo Francisco.
ResponderEliminarLa nieve a la que me refiero es el blancor del azahar y su aroma maravilloso, Sandra.
EliminarUn abrazo.
"Resistiré", no sé hasta cuando pero en la tarea estamos...
ResponderEliminarQue tengas un buen mes de marzo, disfrutando el aroma de nuestros azahares sevillanos.
Un abrazo.
Un abrazo.
Muchísimas gracias, Mari Carmen. Ya sabes que es un despertar maravilloso de la primavera.
EliminarUn abrazo.
Una bienvenida de lujo para marzo. Ya casi llega el clima más lindo. Por ahora, no hacer mucha confianza al voluble invierno. Que sorprende con unos picos muy extremosos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Qué gran observador de la Naturaleza y la Vida eres! Maravillosa descripción y un final lógico. Tampoco podía faltar la lógica y la razón. Abrazo
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