El
hombre es igual que un soplo;
sus
días una sombra que pasa.
(Sal 144, 4)
No;
no quiero decepcionarte;
no
quiero que te aferres a un imposible
que
te haga cabalgar las ilusorias olas
de
un mar que se extiende por las azoteas
y
que surcará por encima de la sangre
de
tus antepasados con tachaduras
hacia
el sarao de las risas,
allá
donde celebrar la progresión que atesoras
habiendo
venido al mundo desnuda,
amoratada
por el tránsito
y
llorando con desesperación.
Te
dio tu madre la turgencia cálida de su pecho,
el
nutriente de sus entrañas,
sus
noches en vela y los deshilachados desvelos
de
sus cuidados hechos caricia y ojeras.
Así
lo hizo con ella la abuela
y
con la abuela la estirpe ancestral
por
donde surca la savia del árbol de la vida.
Todo
es un suspiro;
todo
transcurre en un abrir y cerrar de ojos.
No
acapares, no atesores, no acumules
intransitivos
que no se materializan
en
equipaje por la travesía celeste
de
la que nadie ha logrado regresar;
Vive,
ama y sé feliz en lo humilde:
los
días son un soplo, una vaharada ilusoria,
una
ráfaga de amaneceres y ocasos
que
dejan tras de sí el vacío,
una
asombrosa sombra que pasa.
Bonito homenaje a la mujer en este día tan señalado. Una reivindicación de los valores humanos frente a lo artificioso y vacío.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Mil gracias, Cayetano, me gusta lo bien que lees entre líneas.
EliminarUn abrazo.
Es tan fragil la vida! Me encanto leerte! Gracias por ayudarme hoy a refleccionar. Saludos desde Puerto Rico!
ResponderEliminarA mí me encanta tener lectores y que me comuniquen lo que les sugiere la lectura. Muchas gracias, Jackie.
EliminarUn abrazo.
La historia se repite y así seguirá hasta el fin de los tiempos.
ResponderEliminarEscribes muy bien, es muy bonito.
Abrazos
Muchas gracias, Julia, por esa belleza que aprecias.
EliminarUn abrazo.
Francisco, hoy nos dejas un bello homenaje a la mujer...Ella debe ser consciente de sus raíces, de dónde viene y adónde va. Debe alimentar el espíritu, porque al fin y al cabo la vida es un suspiro, un paso a la eternidad...Muy bueno y profundo, amigo.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño.
M.Jesús
Somos apenas un eslabón del Todo, pero ni más ni menos que un eslabón de la cadena, un elemento imprescindible; esa es la mujer. Mil gracias, María Jesús.
EliminarBesos.
Precioso poema en homenaje a la mujer. La mujer desempeña una buena función en la vida del hombre, cómo madre lo ha concebido en su madre y siempre ha guiado sus pasos hasta verlo convertido en adulto pero esta labor no termina nunca porque por muchos que pase siempre estará ahí tratando de solucionar los problemas que le surjan en la vida. Quién tiene la suerte de tener una hermana sabe que cuenta con su complicidad y su apoyo en todas las empresas que emprenda.
ResponderEliminarHa llegado la hora de formar un hogar propio y la compañía y el amor de la mujer le da fortaleza al hombre en su vida diaria...ella le da fuerza para resolver los problemas de la vida diaria y ella es el impulso y motor para emprender las metas que se ha propuesto.
No tengo que decirte más, las palabras sobran cuando hay tantas vivencias.
Besos
La mujer es el vientre de la Creación, la colaboradora fiel del Dios Creador. En mi esposa, mi nuera y mi madre amo a la Mujer. Mil gracias.
EliminarBesos.
La vida es un suspiro, no me lo recuerdes, aunque lo hagas tan bien como lo haces.
ResponderEliminarAunque no queramos acordarnos de ello, Tracy querida, vamos de la mano hacia la desembocadura.
EliminarBesos.
Qué gran verdad esa última estrofa...
ResponderEliminarEn realidad todo el poema es un cúmulo de verdades que encierran la vida desde que nacemos hasta que partimos. Sin embargo, creo que nos resulta muy complicado entender que este viaje es para el disfrute a pesar de los embates...
Besos.
Me alegra verte pululan por la red. Que nadie te amilane ni decida por ti. Gracias por tu comentario.
EliminarBesos.
Nuestra cultura dramatiza en exceso la muerte. Es una tragedia que muera un niño; es natural que muera el anciano. Y así hay que verlo.
ResponderEliminarCiertamente, Amparo, nos cuesta en demasía dar el paso fuera de la linde conocida.
EliminarUn abrazo.
No podemos perder el tiempo que es tan breve en cosas que nos aparten de lo esencial.
ResponderEliminarBesos.
Muy razonable tu comentario, Sara, te lo agradezco.
EliminarBesos.