Hay una patria hostil,
una patria cautiva
de los poderes ocultos
que tejen en la trastienda
las tejas de la maquinación,
que empobrece
a los que ya se doblan
y enaltece a los poderosos;
una patria sin alma
que se olvida de los últimos
y expatria a los penúltimos,
a quienes gozan de currículos
de la excelencia
hacia el peregrinaje
de un rayo de esperanza
que se vislumbra fuera
de los mojones de esta hostilidad.
Hay una patria hostil,
una patria vomitiva
que hunde en el descenso
a los infiernos
a una gran multitud de sus hijos,
que esclaviza y envuelve
con sutiles seudónimos
las miserias de quienes
ya perdieron todo resquicio de luz,
que caminan ciegos, a tientas,
que los exilia a la desesperanza
sin posibilidades de retorno.
Sí, Francisco, Hay una patria sin alma. Esa patria está herida de muerte, con llagas purulentas que no sé si podrán curarse.
ResponderEliminarTenemos una única salida: REZAR, pedir por esta patria que está en terapia intensiva , con respiración asistida..
La otra salida es educar a las nuevas generaciones , siempre con amor porque sino no sirve y darles luz, mucha luz. ¡APAPACHOS !! :)
No he querido ponerle nombre a esta patria porque todo el mundo puede identificarla con la suya, o casi todos. Las personas hemos centrado todo en el tener y no en el ser. Nada importa lo que eres, sino lo que tiene, y nos dedicamos a idolatrar a este becerro de oro que es el dinero, cuya sed es insaciable. También recortan en educación, porque un pueblo culto es más difícil de esclavizar.
EliminarApapachos.
P/D: A ti y a todos mis lectores que se han molestado en comentar, les pido disculpas porque no he aprendido a multiplicar el tiempo.
Malos tiempo corren, Francisco...la esperanza es que las cosas cambien. Un buen poema. Reciba mi cordial saludo.
ResponderEliminarLas cosas no cambian por sí solas. Cuando los que ejercen el poder no encuentran resistencia alguna, difícilmente cambiarán de actitud.
EliminarUn beso.
Aquí no estamos mejor, amigo. Día a día nos quitan las pocas esperanzas que nos quedan.
ResponderEliminarQuizás la solución esta en lo que dice maria del Carmen.
Cariños....
Ya sé que no hay exclusivas geográficas, porque la ambición no necesita visado para traspasar las fronteras y se expande como una mancha de aceite.
EliminarBesos.
Hoy todo se ha vuelto hostil.
ResponderEliminarUn abrazo.
Malos tiempos para la lírica, que cantaba la canción.
EliminarUn beso.
A esa patria sin alma, directamente le sobramos muchos, le resultamos incómodos...
ResponderEliminarPero, sin todos nosotros no pueden seguir existiendo.
Son caníbales, egoístas, mentirosos, crápulas, inmorales y amorales (por mucho que...)
Sí, corren muy malos tiempos!
Un beso grande!
;)
No sé decirlo mejor ni más pormenorizado que tú, Edurne.
EliminarCuatro besos.
Es cierto lo que dices. Ahora toco esto. Pero también siento que la vida es cíclica y tengo la esperanza de que cambiará, porque nada se perpetúa eternamente. Ya estoy leyendo un post tuyo sobre una patria que abraza y que acoge a sus hijos.
ResponderEliminarBss y buena semana
Mi sensación es que estamos viviendo un cambio de ciclo, una etapa de transición hacia otra cosa y desde dentro es muy difícil ver el mar, sólo lo salobre de las aguas.
EliminarBesos.
Patria, patriota, patrón, patriarca... patraña.
ResponderEliminarLa "patria" auténtica somos los ciudadanos, no esa entelequia nacionalista que algunos pretenden vendernos mientras sacan los capitales a espuertas y dejan morirse de hambre y frío a sus "compatriotas".
Un saludo.
Para los que tienen en sus manos las riendas de cómo dar ejemplo de patriotismo, sólo les alcanza para procurarse su particularismo. Nos quedamos sin referentes.
EliminarUn abrazo.
No hay Patria sin justicia social.
ResponderEliminarPues de lo que no queda en absoluto es de justicia social, así que...
EliminarUn abrazo.
Francisco un magnifico poema social.
ResponderEliminarSe preguntan en los medios ¿que está pasando en Burgos?, se ha liado por hacer un bulevar, por tan poca cosa se ha montado un belén, no me sorprende, la ciudadanía ya está hasta el gorro, como en esta ciudad, en otras saltará la chispa por cualquier cosa y será la justificación para que unos ciudadanos tratados de forma hostil asalten la ciudad. Se nos presenta un mal año.
Saludos
Me siento mayor, limitado físicamente y me da miedo de un estallido social; no por mí, sino por mi descendencia... No quiero perder la esperanza de que se retomen las cosas, se reajuste los despilfarros, pero se piense antes que nada en las personas.
EliminarUn abrazo.
Muy buenos días Francisco.
ResponderEliminarDesde estas lejanas tierras te agradezco tu visita y deseo que tu paso por mi espacio sea agradable.
Aquí, en este momento disfruto de estas grandes y tristes verdades, por las que nos toca pasar en esta agitada vida, mientras que los que no tienen cociencia, o la tienen dormida, aparentan ser felices sin serlo, ya que cuanto más poseen, más desean, muy buenas tus letras para hacernos pensar.
Una buena semana y un abrazo.
Ambar
Esa es la contrariedad a la que lleva el afán acaparador, que el dinero da una sed ilimitada, insaciable, y no tiene cura en sí mismo. Finalmente, Caronte se conforma con dos monedas para llevarnos al más allá y el resto todo se queda aquí.
EliminarUn abrazo.
Siempre son malos tiempos, jamás oí que todo estuviese bien, porque cuando "España iba bien" y un simple albañil ganaba alrededor de los 3000€, los funcionarios tenían el sueldo justo y congelado, pero claro, nadie se acordaba de ellos, pero ése es otro tema... o el mismo.
ResponderEliminarUn abrazo Fco.
El problema, Elena, es que nos estamos quedando sin referentes. No hay institución que no esté manchada por el barro del dinero, por el lodo de la corrupción. Nos están dejando huérfanos y eso es muy descorazonador. Todas la injusticias son recriminables, pero las más duras e inadmisibles son aquellas que afectan a los más desprotegidos, a los más frágiles, a los últimos.
EliminarUn beso.
Es verdad. Besos.
ResponderEliminarGracias por esa marca azul que has dejado en mi mejilla.
EliminarBesos.
Es absolutamente descorazonador...
ResponderEliminarGran poema, crudo, pero grande.
Besos.
Creo que a la realidad hay que mirarla de frente y llamar a las cosas por su nombre. Muchas gracias por tu valoración.
EliminarBesos.
Mientras los bobernantes aplican implicables las medidas pesadas de una austeridad calvinista y opresora, los ciudadanos de apie gritamos contra la injustica. ¿Hay alguien que oiga allá en las alturas del poder? Todos están sordos como una tapia. Sabía que el poder envejecía, pero no que dejara sordo. ¿No son acaso nuestros representates? ¿A quién representan ahora mientras siguen los dictados de esos gobernantes anónimos que nos pisan y atropellan con sus medidas?
ResponderEliminarUn beso
Lamento decirte, Carmen, que no tengo respuesta para tus preguntas, pero que está muy bien y es muy sano cuestionarnos las cosas.
EliminarUn beso.
Ay... Francisco. Estamos igual en todos los países, luchando por la justicia, por una Patria mejor... pero llevamos años así, sin ver la luz.
ResponderEliminarBesos
Dice un viejo refrán: si los burros volaran, se taparía el sol. Parece que esta oscuridad obedece a que hay muchos burros sobrevolando.
EliminarBesos.
Hostil...me gusta la palabra utilizada. Una vez, cuando describí así a los habitantes de un pueblo de la meseta castellana, de ésos lindando ya con un norte verde, pero con el que no comparte más allá de una frontera, quienes me escuchaban me dijeron que nunca habrían utilizado dicha palabra para denominar a un pueblo español.
ResponderEliminarMira por donde, ahora vienes tú a nombrar hostil a una patria que no quiero escribir con mayúsculas, porque como bien dices, los hostiles no son quienes sufren, sino quienes dañan.
Si. Estoy de acuerdo con Emilio Manuel, lo que está sucediendo en Burgos, habrá de suceder en más de una ciudad de esta patria hostil que un día fue un gran país.
Tus versos, como siempre, dan en la diana. Afilada está tu pluma amigo mío. Un Quevedo o un Góngora nos vendría bien para que lidiarais con vuestras palabras al "toro malaje" de la política nacional.
Abrazos!!
No sé si agradecerte o arrugarme al querer instalarme en el nivel de los grandes del Siglo de Oro, desde luego llevada por tu afecto. En mi opinión, esto es bastante más gordo que una política nacional. Las fronteras ya sólo existen para las personas, no para las mercancías, el dinero, la política... Nuestro gobierno hace al dictado de la Unión Europea y esta de las apetencias del poder oculto de los grandes inversores. Todos somos reos, posiblemente en tanto sigan existiendo tan vastas propiedades unipersonales.
EliminarBesos.
Esa "patria hostil" debe reflexionar y reconsiderar lo que hace con sus hijos y ciudadanos...El tiempo debe poner todo en su lugar...Rezaremos y pondremos de nuestra parte para que sea así, Francisco...Buen grito crítico y solidario, amigo.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo inmenso...Mi ánimo siempre.
M.Jesús
De momento estamos haciendo un mal negocio formando a nuestros hijos aquí y enviándolos a dar frutos en el extranjero, como nos sucede en tu caso y el mío. No pierdo la fe. Rezo constantemente por los que sufren, pero también siento la necesidad de denunciar aquello que me parece fuera de toda lógica.
EliminarBesos.
Hola Francisco la verdad que el país y quienes nos gobiernan no piensan en el pueblo si no en ellos mismos y sus amiguetes.
ResponderEliminarEntiendo que hay que movilizar el país para que haya más trabajo, pero lo que está sucediendo en Burgos es un dinero que vendría bien para otras cosas. Los españolitos ya hemos aprendido la lección y no queremos que embarguen nuestros futuros, preferimos que se vaya haciendo cosas necesarias e importantes para poder seguir viviendo y comiendo cada día. Teniendo una sanidad sana para todos y una educación única y sin privatizar. Hemos abierto los ojos y la furia por los engaños está dando sus resultados.
Muy bueno tu poema sobre la hostilidad de quienes nos gobiernan.
Saludos y besos
Hemos malgastado mucho dinero haciendo aeropuertos infrautilizados y otros cerrados por falta de tráfico aéreo; hemos hecho autopistas parelelas a autovías que ahora son negocios ruinosos; se han vaciado las arcas de ayuntamientos y diputaciones, de gobiernos autónomos y central... El dinero, como la energía, no se destruye, cambia de manos: ahora hay muchos empobrecidos, pero algunos que se han puesto las botas.
EliminarBesos.
Siempre das en la diana con tus poemas solidarios y, a mi juicio, tienen mucho más poder de convicción y contundencia que ciertos actos de los que se desconoce los móviles y a favor o en contra de quien van y quien les da la representación para arrogarse el derecho a destruir los bienes de los demás. Una cosa es exigir derechos y otra quemarle el coche al vecino. Un abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarMe limito a decir aquello que no me parece oportuno, pero me siento incapaz de levantar la mano contra nadie ni sus bienes. El otro día, al pasar por una plaza, había unos jóvenes tirando a un naranjo para derribar las naranjas maduras del árbol. Estos son naranjo amargos y no se pueden comer, además de que están para adorno de calles y plazas a lo largo de la ciudad y no para apedrearlos. Con cierto temor, me acerque a ellos y les reprendí la acción. Me explicaron que tuvieron que tirarle al árbol para que cayera la pelota, cosa que en principio es posible que así fuera, pero aprovecharon la coyuntura para hacer destrozo. No es admisible que la gente se manifieste pacíficamente y un grupo de cafres (con perdón de la etnia) se dedica a destrozar el mobiliario urbano, los escaparates, cajeros automáticos, falladas, etc.
EliminarUn abrazo.
Tendríamos, hoy, que cantar con la "Oda al dos de mayo" por la situación a la que nos han traído:
ResponderEliminarOigo, patria, tu aflicción
y escucho el triste concierto
que forman, tocando a muerto,
la campana y el cañón...
Lo triste es que en la situación actual nada, nada, toca a muerto...
Los descendientes de Bernardo López García te agradecerán el grato recuerdo que haces de su antepasado con este conocido poema. Con poemas no podemos torcer la voluntad de quienes nos gobiernan, pero con el silencio menos aún.
EliminarUn abrazo.
Y hay un exilio tajante, donde ya estamos viviendo todos aunque no nos hayamos ido del pueblo.
ResponderEliminarUn abrazo, Francisco!!
Es cierto. De momento se han exiliado, por lo general, los más preparados (andamos regalando a nuestros universitarios), pero hay otro exilio interior que es doblemente penoso. Gracias, Mónica.
EliminarUn abrazo.
No solo una mi querido Francisco, hay muchas patrias hostiles en el mundo.
ResponderEliminarSentidas verdades nos dejas hoy.
Abrazos y feliz semana.
Por eso mismo no le he puesto nombre, para que cada lector pueda identificarla con la propia. Gracias, Betty.
EliminarUn beso.
Cuánta verdad en tus palabras, Francisco. Saludos y feliz 2014
ResponderEliminarGracias, Anónimo, (lamento no poder identificarte). A pesar de lo dicho y lo mucho comentado, por encima de todo, no perdamos la esperanza: podemos y debemos salir de esta.
EliminarUn abrazo.
Vendrán tiempos mejores, pero mientras llegan...que largo y que duro se está haciendo...
ResponderEliminarUn abrazo
Esa es la esperanza, que un día comience todo a cambiar, pero, entre tanto, serán muchos los que habrán salido del sistema.
EliminarUn beso.