A Carmen Luque y familia
Hacía años;
María hacía años que se había
quedado sola,
ensimismada en sí
como con los ojos glaucos
u opaca persiana bajada
que hace infranqueable el interior.
La edad es una enfermedad en sí,
mas ayudada por severos achaques
es acelerador de partículas
que todo lo defenestra.
Hacía años que María miraba hacia
adentro
en una soledad que no le permitía
gozar de los cuidos,
ni saber de las manos que los
recibía.
Era un ángel;
María era una sonrisa congelada de
ángel
que se fue nublando,
que se apagó
como farol apedreado en la noche
y hecho tinieblas.
Yo sé de sus finezas,
de sus manos abundantes
y su amorosa palabra de acogida...
María ha abandonado su soledad
para vivir la presencia eterna
y me duele como farol apedreado;
pero María merecía el tránsito
de la soledad a la luz indefinida,
donde la música es audible
y tañida por ángeles celestes.
¡Descanse en paz!
La mayoría de las personas cuando pierden su pareja, a edad avanzada, terminan como María…como "farol apedreado" no sabiendo como avanzar sin el apoyo de su otra mitad. Todos tenemos el boleto de regreso en este incomprensible travesía, pero así es. Me ha encantado la última parte…
ResponderEliminar"pero María merecía el tránsito
de la soledad a la luz indefinida,
donde la música es audible
y tañida por ángeles celestes"
Mis condolencias a su familia.
Abrazos querido Francisco y te deseo buen fin de semana.
Muchas gracias. Es una sensación muy agradable ver reproducidos unos versos propios.
EliminarBesos.
Que en paz descanse ! Recibe querido Francisco, tú y tu familia, mis condolencias.
ResponderEliminarPor esas cosas de la vida yo también he perdido hoy a una gran amiga.
La tristeza me agobia. Son momentos difíciles de transitar.
Un abrazo.
Lo lamento mucho, María del Carmen. Es un desfile incesante al que uno no llega a acostumbrarse.
EliminarBesos
Bonito homenaje de despedida. El dolor no impide elaborar estas sentidas palabras de adiós a una persona que debió ser importante para ti.
ResponderEliminarUn saludo.
La selección de las palabras es ungüento, pero sólo eso.
EliminarUn abrazo.
Es triste para "el otro" ese mirar hacia adentro de una persona querida; en ese sin vivir, lo mejor es, para aquellos que creéis, hacerlo en la presencia eterna.
ResponderEliminarUn abrazo
No sé si es porque ahora la vida es más larga, pero esta enfermedad está presente en un sin fin de personas mayores que les apartan de todo estando en vida.
EliminarUn abrazo
Quizás ahora esa sonrisa congelada de ángel ya no esté apagada, ahora sea todo luz.
ResponderEliminarDe eso no me cabe dudas; esa es mi esperanza.
EliminarFuerte abrazo.
A veces cruzar ese umbral supone una bendición largamente esperada. A veces el tiempo se ha cumplido ya mucho antes de que los ángeles celestes vengan a buscarnos.
ResponderEliminarAhora ya no habrá soledad. Descanse en paz.
Bisous
En este caso ha vivido una prórroga que ya era sólo latido.
EliminarBisous
Me duelen tus palabras porque sé de esas Marías que viven en soledad; me duele internarlo y no saber cómo aliviarla.
ResponderEliminarHermoso tu poema Fco.
Un abrazo.
Gracias, Elena. De estos casos todos tenemos alguno cercano.
EliminarBesos
La muerte es algunas veces liberación, así veo hoy tus palabras -hermosas como ningunas-
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y mis condolencias.
Muy bonito y sentido. Muy triste
EliminarAsí es, Paco. En este caso es claramente una liberación.
EliminarUn fuerte abrazo.
Gracias, Marisa, por tu opinión.
EliminarBesos
Todo un homenaje de amor y despedida, Francisco.
ResponderEliminarMaría sonríe, mientras lee tu poema...Ella tiene la luz del conocimiento y el amor, que abraza todas las soledades...Ella ha emprendido su último vuelo, mientras los demás seguimos ensayando "pequeños vuelos" de letras y sentimientos...
Que la Providencia os ayude a todos en estos momentos de tristeza.
Mi abrazo inmenso y mi respeto.
M.Jesús
Gracias, María Jesús, por la ampliación del poema en tus manos, cuya visión es cpoincidente con la mía.
EliminarBesos
Se fue a buscar su compañía y aqui osd ejo la soledad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Cada persona que se marcha para siempre deja una huella. María me deja su sonrisa.
EliminarBesos
Mis condolencias para toda la familia. Un fuerte abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarMuchas gracias, Felipe, por tu cercanía.
EliminarUn abrazo
En esta vida todo es equilibrio, es el Yin y el Yang
ResponderEliminarcuando una persona "en vida" sufre, está preparándose para la eterna felicidad y al final resultará el equilibrio, Mientras mas se sufra mas felicidad nos espera
Salud y transparencia
No sé si se trata de una regla de tres inversa, pero San Pablo dice: "Los sufrimientos de esta vida no son nada comparado con la gloria que nos espera".
EliminarUn abrazo.
No se qué decirte, Francisco , esta vez me quedé otra vez sin palabras . Ella ahora ya no vive en sombras ni sufre , ahora vive en la Verdadera Luz y la verdadera Vida .
ResponderEliminarUn abrazo grande
Así lo creo y así lo afirmo. Gracias, Charo.
ResponderEliminarBesos.
Creo que cuando una persona lleva años sufriendo por una enfermedad, la muerte tiene que ser una liberación, un rito de paso en pos del descanso tan anhelado.
ResponderEliminarMis sinceras condolencias
Muchas gracias Mirentxu por tus palabras. Tanto para ella como para los suyos ha sido una liberación, aunque la separación definitiva sea dura.
EliminarBesos
Una sentida y hermosa elegía.
ResponderEliminarSaludos desde El Bierzo
Gracias, Paco, por tu comentario. Es verdad que la elegía es bien sentida.
EliminarUn abrazo.
Mil gracias mi querido amigo y admirado poeta por concedernos el privilegio de ser testigos de tan bello homenaje que le haces con tus versos a tan magna y valiente mujer.
ResponderEliminarMuchos besinos de esta amiga con inmenso cariño.
Besinos para ti mi querida amiga.
EliminarUn bonito recuerdo, Francisco. María es ya un espíritu libre, no está sola y seguro que sonríe al leer tus bellos versos.
ResponderEliminarUn abrazo muy fuerte.
Yo estoy convencido de que ella está en un buen lugar.
EliminarBesos.
Hola Francisco, bello poema. Es un poema que duele pero a la vez da paz porque esa persona tan querida para vosotros ha dejado de sufrir.
ResponderEliminarCreo que a casi todos los mortales no nos da miedo la muerte, si sufrir o ver sufrir a las personas que queremos.
Me ha gustado mucho el poema. Eres un buen poetista. Haces un poema igual al dolor, a la alegría que al desamor. Te da igual el sentimiento porque tú eres todo sentimiento y por eso te puedes expresar tan bien en tus poemas.
Que descanse en paz.
Saludos y besos
Gracias, Isa. No quiero que me admires, quiero que me quieras.
EliminarBesos
Sin duda .. debió ser una mujer estupenda .. Lamento su pérdida.. y a la vez .. me alegro ( suena cruel verdad?) .. Solo quién ha asistido a una dura enfermedad sin remisión me puede entender ..
ResponderEliminarDescanse en paz .. y estoy segura que estará en un buen lugar ..
Mis abrazos siempre Francisco y Pepita
El sufrimiento nos humaniza, Aris.
EliminarBesos
Hola, Francisco:
ResponderEliminarHermoso, sencillamente hermoso, aunque duela nos acerca a una triste realidad, pero también a la certeza de que su tránsito fue para bien.
Mi madre murió hace pocos días, en circunstancias parecidas.
Un abrazo.
Lo lamento, Rafael. La pérdida de la madre no se supera fácilmente. Uno se siente protegido mientra vive su madre, y como frente a un abismo cuando ella se va. Ojalá lo superes pronto y te consuele saber que le ha llegado el ansiado descanso eterno.
EliminarUn fuerte abrazo.