08 enero 2020

EL VIENTO Y LA BRISA




El viento se enreda
entre las ramas del naranjo
y entresaca notas arrebatadas
de entre la agitación,
con algún que otro gemido
de tarama desgarrada y dolida.

Por la mañana, rendidas bajo la copa,
un centenar de frutos verdes
son vidas interrumpidas
que no llegarán nunca a una mesa.

Sobre las blondas de su melena,
la brisa es caricia que remece
el pendular de una melodía
que habla de los arrebatos del alma,
entre el andate y el adagio
y con la belleza estética de una sinfonía.

Entre el viento y la brisa,
entre el naranjo y la huertana,
en este discurrir apacible y retirado:
beatus ille, lejos del mundanal ruido.

14 comentarios:

  1. Nada como el viento para hacernos sentir vivos.
    Feliz día, Paco.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y nada como la Naturaleza para gozar de lo más profundo y sencillo de la vida, Cayetano.
      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Tu poesía, Francisco, me provoca un estado de paz, como esta, que termino con un rictus de alegría en la cara. Gracias amigo.
    😘🍀🌹

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo celebro, Inés, pues es ese el estado sentido y deseado.
      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Parece que estoy viviendo la escena. Parece que estoy ahora en medio de los naranjos. Ese viento de invierno, me hace tener frío , mientras la brisa del mar me hace una suave caricia.

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por hacerme ver que has sentido realismo en mi texto.
      Besos.

      Eliminar
  4. En medio de la soledad y el silencio es donde se puede pensar, imaginar, soñar....y mucho mas si se está en un lugar entre vegetación, tocando el sol, o de noche con la luna.
    Ya me imagino entre pinos cerca del mar....
    Gracias por tan bellas letras Poeta.......Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ese idílico Beatus ille que sobrecoge y aísla como un paraíso.
      Un abrazo.

      Eliminar
  5. Me encanta la naturaleza sobre todo si hay un río cercano y un buen árbol para poder apoyarse en él al sentarme y escuchar el ruído de la corriente de agua...ideal para reflexionar.Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ese es el espacio, el que cada uno tiene en mente y donde las cosas son apacibles y muy distantes de la realidad cotidiana.
      Un abrazo.

      Eliminar
  6. Gracias por lafrescura que has procurado a mis pensamientos al leer tu poema.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si lo he logrado, es que he alcanzado mi propósito. Muchas gracias, Tracy.
      Un abrazo.

      Eliminar
  7. Un poema que trasmite serenidad y belleza. Que delicia es sentir el viento acariciar el alma. Saludos amigo Francisco.

    ResponderEliminar