Nívea;
como una novia esperada
a la puerta de un templo...
Minutos eternos
que pasan sin pasos ni prisas,
al tiempo que repaso
los proyectos
como en un rápido examen de conciencia.
Me encuentro entre una muchedumbre
a solas con la espera;
la garganta me oprime,
el sudor aflora
y recuerdo la pose de serenidad
que se aconseja para estos instantes.
Tan sólo sé que vendrás de blanco
y que el resto forma parte del secreto
mejor guardado;
el emplazamiento es un hervidero
cuando un sonido inequívoco se abre paso
entre la espesura
y el gentío es maleza.
Quiero correr hacia ti,
cuando recuerdo los ensayos
de una amplia sonrisa bajo el dintel
mostrando la calma de la que fui abandonado.
Finalmente, apareces
como una novia,
como una novia,
con andares elegantes
sobre el tapiz rojo, con pasos mullidos
y lentos, muy lentos, muy muy lentos,
inmaculadamente nívea,
como elegante zancuda
sobre campo de amapolas.
No tengo palabras para expresarte la admiración que siento por tus bellas letras Paco. Indudablemente, un excelente poema ilustrado por una magnifica imagen de la nívea ave zancuda, tan blanca, tan quieta, como admirando la belleza del colorido de las amapolas.
ResponderEliminarUn fuerte y calido abrazo
Te agradezco muy especialmente el comentario. Sé que estás muy ocupada y que me acostumbraste mal cuando lo hacías a diario. Gracias por tus palabras.
EliminarUn beso.
Admiro tu manera de transmitir, Francisco, a veces, me quedo muda sin saber qué decir.
ResponderEliminarFelicitaciones por este bellísimo poema.
Un beso.
Yo también paso por muchos momentos que no sé que decir, María, por tanto debe ser algo muy usual. Gracias siempre.
EliminarUn beso
pORQUE QUIERO MUCHO A MI DULCE María , hago mías sus palabras y porque ya no sé más que decir ante tamaña hermosura. Un poema escandalosamente hermoso . Una de esas joyitas, que bien podría ser una gema de jade, es tu poema.
ResponderEliminar"Tan solo sé que vendrás de blanco / y que el resto forma parte del secreto / mejor guardado ..." " Se puede saber como haces españolito para que nazcan tan bellas figuras literarias ? si me lo dices, acercándome a lo mejor me contagio.
El homenaje de mi admiración. ¡APAPACHOS !!
No siempre lo hago, pero en esta ocasión he querido forzar a más de una posible interpretación. El secreto mejor guardado de una novia es su vestido de boda, ¿no es cierto?
EliminarEn cuanto a cómo hago, correntina, no voy a presumir diciendo que sale al azar, sino con cierto esfuerzo, pero sólo son satisfactorias las cosas que nos cuestan y no las fortuitas. Yo también te admiro.
Apapachos.
Simplemente hermoso al igual que la imagen, me gusta leerte, transmites mucho.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias, Betty, por considerarme de esa forma.
EliminarUn beso.
Una foto indica quietud, pero tu haces mover a la zancuda con tu poema.
ResponderEliminarUn abrazo
No sabemos si es una zancuda o una novia, ¡ah!
EliminarUn abrazo
Hola Francisco. Cada día con tu entrada (sobre todo con tus poemas) superas la entrada del día anterior. Espero sigas así durante mucho, mucho tiempo. Ángel
ResponderEliminarEsa superación constante no quiero creer en ella porque me obliga a un esfuerzo mayor, simplemente hay días que salen las cosas mejor que otras.
EliminarUn abrazo.
Precioso suspense de la espera,
ResponderEliminarel compás de la ansiedad que brinca
en el pecho esperanzado,
y al final
llega con patas y alas.
Ese podríamos decir que es el verdadero tema o asunto, el suspense; no sólo en la espera, sino en saber realmente qué espera y quién espera.
EliminarUn beso
Jo!!! Qué maravilla como escribes...
ResponderEliminarTú sí que eres maravillosa dándole eco a todo lo que hago.
EliminarUn beso
Te has quedado conmigo de todas, todas. Con razón has puesto la foto al final.
ResponderEliminarHas jugado maravillosamente con las palabras para jugar al despiste.
¡Eres bueno, ¿eh?!
Espero que no te sepa mal ese juego de hoy. Tal vez me he quedado conmigo mismo.
EliminarUn beso
A veces la naturaleza es mágica, nos facilita remontarnos a ese instante inolvidable en que esperamos, nerviosos y emocionados, la llegada del novio/a...Y es que la esencia del amor habita en sus paisajes, sus colores y manifestaciones y nos sugiere la palabra inspirada, emotiva y precisa para elevar al arte el sentimiento...
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo grande por tu creatividad y buen hacer,Francisco.
M.Jesús
En tus comentarios hay siempre reconstrucción, recreación, lectura atenta y comentario atinado. Gracias por todo ese esfuerzo.
EliminarUn beso
No sé cómo lo haces, pero lo haces hermoso.
ResponderEliminarUn abrazo Fco.
Yo tampoco sabría explicártelo, Elena. El único método es ponerme a ello, a veces sale y otras no.
EliminarUn beso.
..he esperado a tu lado su llegada mientras mordisqueaba un tallo de grama y jugaba al avioncito con una rama...no hice ni un ruido..casi ni respiraba para que el ave no se asustara y saliera huyendo de nuestros curiosos ojos paparazi....un beso, refrescante entrada..
ResponderEliminarUn bonito comentario de una provechosa lectura.
EliminarBesos.
Cuando el gentío es maleza... bella imagen donde el mundo es simplemente un decorado que enmarca a la persona amada, pero para nosotros en ese momento sólo ella es la vida.
ResponderEliminarUn saludo.
Te has fijado en una perspectiva preciosa, Cayetano. Muchas gracias.
EliminarUn abrazo.
Un saludo muy afectuoso a todos mis lectores. No me siento en la obligación de hacerlo, pero ya que muchos habéis apuntado en ese sentido, cuento que la voz poética parece ser un novio a la puerta de l templo en los instantes previos a la llegada de la novia, pero es posible que esa voz no sea un novio sino un naturalista esperando capturar con su cámara la aparición de la zancuda. Pero también es posible que la novia apareciera entre la muchedumbre con el señorío de una modelo, la mujer de sus sueños con andares de pasarela. Reconozco que se ofrece, no sin intención a varias interpretaciones.
ResponderEliminarBueno pues yo he visto un maravillosos campo de amapolas y alguien vestido de blanco, novia, niña de primera comunión, alguien a la espera. Pero podría suceder en sueños que es como la poesía adquiere unos tintes que enamora.
ResponderEliminarBss
Efectivamente, Katy, se trata de una espera. No sabemos de qué. En la imagen final aparece un ave, pero es sólo una ilustración.
EliminarUn beso.
Antes que nada soy Ceciely, Google + cambió mis datos en todos sus servicios.
ResponderEliminarHola amigo…Bellísimo poema!!!
Superpones imágenes y las enlazas perfectamente a tus sentimientos y recuerdos. Imaginación desbordante…eres muy generoso al compartir momentos inolvidables de tu vida. La zancuda es adorable, cúidala bien para que siga erguida caminando en el tapiz rojo de la vida.
Besos.
Pd. Si regresé por el comentario, bingo por la diana.
Muchas gracias, Cecilia, por tu precioso comentario. Has variado un poco el nombre, pero eres la misma y afectuosa amiga.
EliminarUn beso.
¿Es una garza?
ResponderEliminarEs que no estoy segura, la verdad, pero está preciosa en esa imagen.
De lo que sí estoy segura es de que así de lento se recibe mejor a quien se anhela.
:9
Muy bonito, Francisco.
Besos.
No soy especialista, pero creo que sí es una garza. Primero tuve la imagen y luego vinieron las elucubraciones, finalmente el poema. Este ha sido el proceso.
EliminarUn beso.
Ups...pretendía ser una sonrisa, pero ha salido numerada, ja,ja,ja
ResponderEliminar:)
Ahora sí.
Muak
Hay ocasiones en las que los números, incluso traducidos, dan risa. Por ejemplo: "hemos tocado fondo, remontamos la crisis..." ¿Quiénes?
EliminarUn beso
Una ricura de poema, me ha producido tanta ternura...y una sonrisa grande.
ResponderEliminarGracias :D
Un abrazo compañero de letras, poeta.
Ternura, sonrisa... parece que tiene todos los alicientes, al menos para ti. Gracias por llamarme poeta, Ángeles.
EliminarUn beso.
Bonito retrato de los momentos de la espera, los nervios del novio, la grácil figura de ella.
ResponderEliminarBonito retrato de quien espera que su dama blanca aparezca en un campo de amapolas, listo para disparar esa instantánea que la inmortalice en una ráfaga.
Precioso poema Francisco. Mañana "enlazo tu nombre con tu blog". ;)
Besos.
Gracias, Laura, por tu amabilidad. Si tuviera ocasión, me enlazaría de tu brazo y te invitaría a un café o lo que te apeteciera por la lectura que has hecho.
EliminarUn beso
Como te posicionas cuando escribes, Dios mio¡, eres novio, eres tiempo, eres nervios, eres espera, eres emociones, sentimientos que se escapan y eres el DIRECTOR de todo el paisaje...
ResponderEliminarBravisimo,
Besos muchos ♥♥♥
Escribir es crear, es poner voces y actitudes a los personajes. Gracias por tu bello comentario.
EliminarUn beso.
Que bonito poema, no se que ave es esa, pero es preciosa jejeje. Un besazo.
ResponderEliminarPosiblemente sea una garza, pero es lo de menos; el tema es la espera, como yo espero tus besazos.
EliminarUn beso.
Hola Francisco, que bonito como nos presentas a ese ave blanco que llega silencioso. Mereció la pena esa espera recostado entre una piedra, tal vez en el tronco de un viejo árbol y al final la espera dio lugar a ese bello espectáculo de la naturaleza. Ella vestida toda de blanco entre una alfombra de amapolas y el verde de la hierba.
ResponderEliminarBello poema y gratificante espera.
Saludos y besos
Lo de la espera es seguro, Isa, pero es posible que no fuera en la naturaleza, sino bajo el dintel de un templo. ¿Quién sabe?
EliminarUn beso
Yo sigo pensando que hablas de la novia, con permiso de la zancuda. ¿Qué quieres que te diga? pues eso: im-presionante. Un fuerte abrazo desde mi mejana
ResponderEliminarGracias, Felipe. No te falta razón.
EliminarUn abrazo
Me encanta leer tu poemas , pero este al leerlo es tan expresivo que parece estar viéndolo.Saludos
ResponderEliminarMe alegra que lo hayas vivido así junto a mí, por lo que te quedo muy agradecido.
EliminarUn beso