Maríname esa mirada tuya
hasta la saturación
y envuélvela en tempura
para que, crujiente, me
explosione
en la boca y sea sustitutiva
de tus besos cálidos,
esos que me rescatan de la
tormenta
y me dejan al pairo
de donde no quisiera
regresar nunca.
Si muero de asfixia,
que sea tú la boca
ejecutora.
Una muy bonita manera de morir... de amor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya sabes, Rafael, que el amor siempre lo exagera todo.
EliminarUn abrazo.
Estot contigo. A la amada hay decirle esas cosas: maríname, adóbame, alíñame, guísame y... cómeme.
ResponderEliminarSaludos a don Paco que hoy se levantó con una "receta" nueva.
Ja, ja, ja... Verdad que sí, Cayetano?
EliminarUn abrazo.
Te leo y siento que tengo 18 años de nuevo con esos versos tan llenos de vida.
ResponderEliminarSaludos.
Desconocía ese poder rejuvenecedor en mí. Muchas gracias, Tania.
EliminarUn abrazo.
"con un beso..la vida..." esa es una letra de cancion, la tuya es la muerte, pero tambien vale jejje..besos
ResponderEliminarMi letra no creo que sea de muerte, sino de vida, de vida que podría acabar dulcemente en un beso.
EliminarBesos.