La vida es un soplo que pasa
(Sal
144. 4)
Se nos llenó la vida de años
y los años del desaliño de
los aparejos
mal usados,
las fatigas y limitaciones.
Todavía son numerosos los
proyectos
y muchos los globos
que ascienden como burbujas
y se quedarán en bosquejos.
La vida es un soplo que pasa
una itinerancia
vivida sin ensayos,
de tropiezo en tropiezo,
de hallazgo en hallazgo.
Tardamos demasiado en
desentrañar
el verdadero sentido de esta
fugacidad
y cuando vemos la luz
al final de la tiniebla,
es casi de noche, hora de
dar de mano.
Perdón por mis desatinos,
por mis errores,
por mi falta de humildad,
por todos los malos ratos
que has padecido por mí.
Abróchate a mí
y sigamos caminando hacia la
meta.
La vida es un "ratico" de nada; por eso no conviene desperdiciarla.
ResponderEliminarY qué mejor manera de aprovecharla que visitando a los amigos, a ver qué escriben, siempre que ande uno por casa, que es mucho decir en este mes locuelo.
Acabo de llegar y en unos días me voy otra vez.
Un abrazo, Paco.
Mil gracias, Cayetano, por tu visita. Sigue disfrutando tus vacaciones.
EliminarUn abrazo.
La vida es un soplo de aire... y se nos hace larga, siendo corta.
ResponderEliminarPor eso a vivir que son dos días
y que no nos quiten lo vivido, o bailado.
Besos , versos y flores.
MA.
El blog de MA.
Antes de que nos demos cuenta, ese soplo habrá apagado la vela y nos iremos en busca de la Luz.
EliminarUn abrazo, MA.
LA vida es un soplo, como dices, pero nos da tiempo para ser conscientes y darnos cuenta de nuestros errores...Muy buena esa humildad, que nos hace grandes a todos al leerte, Francisco.
ResponderEliminarMi abrazo y mi ánimo siempre.
M.Jesús
Cierto, María Jesús. Al menos yo estoy en ese tiempo, esa prórroga destinada a corregir los errores, que no son pocos.
EliminarUn fuerte abrazo.