A Amaya Martín
Yo no sé explicarlo científica
o académicamente,
pero entiendo que para que
pase un año
no son pocos los esfuerzos
y tampoco los desvelos
y las preocupaciones.
Tienes que despertar casi
cuatrocientas veces,
sin contar las siestas,
ni las guardias,
ni el sopor de los días
aciagos;
en ese tiempo, el corazón
se exprime y expande
como si se tratara del
segundero
de un reloj analógico como
el del abuelo,
y compungirse de dolor y/o de
alegría,
un número incierto de veces cada
día.
Espero que me entiendas,
Amaya,
lo que me propongo es
simplemente
felicitarte
por la esplendorosa
jovialidad de tu cumpleaños.
Una felicitación de cumpleaños muy original.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Gracias, Cayetano. Espero que ella lo reciba con el mismo amor que le profeso a ella y a toda su familia.
EliminarUn abrazo.
Magnífica felicitación, el paso del tiempo refuerza los vínculos.
ResponderEliminarAbrazos
Francesc Cornadó
Moltes gràcies, Francesc. Efectivamente el tiempo lo va anudando todo y nos construye paso a paso.
EliminarUn abrazo
Bonita y original felicitación, nada usual.
ResponderEliminarSaludos
Me uno a esa felicitación tan especial.Saludos
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