Palomas
son tus ojos.
(Ct 1, 15)
Duerme
profundamente
alejada
de todo resquicio de dolor,
estrenando
la Paz Suprema
para
un corazón que, estando agitado,
derrochaba
paz a manos llenas.
Agazapadas
palomas son tus ojos
─párpados entornados─
que
empapados de vida latente
se
asoman a la infinitud sin retorno,
sin
dolor, sin sufrimientos,
donde
el vacío es plenitud
y
jamás se pierden los diamantes.
Te
has aferrado al rosario de madera de olivo
─tallado en Jerusalén─
y en
éxtasis te has ido a la Jerusalén Celeste.
Una
pequeña rosa es tu boca, cuyos pétalos
ya
no acusan el flujo respiratorio
y
dejan el ambiente marcado
con
la huella de tu presencia en despedida,
sedosa
y sedante
.
Duerme
profundamente hacia el abrazo del Padre,
donde
nunca te cegará la oscuridad,
ni
volverás a sentir sed ni frío.
Es
mucha la soledad que dejas y mucha
la
compañía que nos has regalado.
¡Descansa
en Paz, María del Carmen Názer,
espéranos
dulcemente en el cielo, Beba querida.
Yo no la conocía, pero sé de tu amistad con ella. Te acompaño en tu dolor.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Solo puedo darte el mi mas fuerte abrazo desde la distancia.
ResponderEliminarHoy no puedo decir nada...
ResponderEliminarUn abrazo, Paco. Seguro que no participa del dolor que ha dejado.
ResponderEliminarAl igual que Cayetano, yo tampoco la conocía, pero sabía por Chelo que disfrutabais de una buena amistad. Recibe junto con un cálido abrazo todo mi apoyo.
ResponderEliminarFrancisco, esta entrada no se ha actualizado en mi escritorio...Ahora la veo por primera vez...
ResponderEliminarQUE DIOS TE BENDIGA Y TE DEVUELVA EL DOBLE DE TODO LO QUE LE HAS DADO A NUESTRA AMIGA...Y ELLA RECIBA EN EL CIELO TODA LA PLENITUD QUE MERECE.
La hemos querido mucho y la seguiremos queriendo.
Te dejo mi abrazo inmenso y mi cariño Francisco.
M.Jesús
Un abrazo Paco. De ésos que reconfortan y ayudan a sanar.
ResponderEliminarQue pena, con lo hermosa mujer de bellos sentimientos era.
ResponderEliminarUn ángel de los de verdad, sube al cielo.
Besos
Es mucha la soledad que dejas, tanto como el cariño dado...
ResponderEliminarMucha.
No la olvidaremos...
¡¡Preciosa hadita!!
Francisco, no lo puedo creer amigo.
ResponderEliminarMe he emocionado mucho, me caen las lágimas... qué triste que estoy amigo.
Pobre María. Qué increíble cómo desde lejos uno puede querer a alguien. Es porque era, es... un ángel.
Besos y abrazos para ti que la adorabas más que nadie y ella te quería muchísimo.
Voy a escribir algo en el blog.
Cariños
Un abrazo en la distancia para ti y toda la familia.
ResponderEliminarAhí va también el mío, amigo, y un beso a lo alto para esa mujer que, aunque no la conocíamos, sabíamos de ella, y yo en particular por su profesión y vocación, que son las mías.
ResponderEliminarDescanse en paz.
Un abrazo apretadito, amigo mío!
Seguimos acompañándote, buen viaje querida! Rosana, estamos con vos. Te abrazo Francisco.
ResponderEliminarQue Dios la acoja en su gloria.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Descanse en paz... Mis condolencias para su familia y para ti. Reciban un abrazo muy grande y profundo, con todo cariño.
ResponderEliminarAcá, desde este lado del planeta, donde no te conozco a ti ni tampoco a María del Carmen, existen sin embargo estas hebras se unen formando sentimientos sinceros que nos colocan en la cercanía de una persona como tú, noble y aplicada en lo que escribes.
ResponderEliminarTengo muchas cosas que agradecer a Internet en general y a mi actividad bloguera en particular. En la resaca de la pérdida de esta gran amistad, repasando los nombres de las personas que habéis dejado aquí vuestros comentarios, me pregunto: ¿Cuántos sufrimientos me esperan o cuántas personas sufrirán por mi causa?
ResponderEliminarEn principio no era consciente de que por este medio se podría trabar grandes amistades, pero el tiempo me ha ido demostrando este y otros muchos errores. Un medio en el que hay mucho de alocado, de mostrarse por el lado más favorable, incluso de aparentar lo que no se es; sin embargo uno siempre encuentra almas gemelas a las que respetas y te respetan en las diferencias, y a las que apreciar y querer con toda sinceridad. Este es el caso de esta dulce maestra del norte de Argentina, a la que llevaré en mi corazón por siempre.
A todos, muchas gracias por ser y estar. Abrazos y Apapachos.
En tu luz aprendo a amar.
ResponderEliminarEn tu belleza cómo hacer poemas.
Tú bailas dentro de mi pecho, donde nadie te ve, pero a veces
yo te veo, y esa visión se convierte en este arte.
MariCarmen Nazer moría de amor por RUMI.
Apapachos y abrazos
Sé que la pérdida de Mª del Carmen la has sentido como algo propio, por eso te mando un fuerte abrzo acompañado de mi dolor y mi cariño por ella.
ResponderEliminarFrancisco eres una bella persona que acompañó a María, a pesar de la distancia, hasta el último momento. Uno nunca está preparado para la muerte y duele tanto cuando llega, pero también el hecho de tener tan cercano a alguien como tú a María seguro le hizo mucho bien. Ella era auténtica como lo fue su partida.
ResponderEliminarA veces, hay amigos en este medio que desaparecen sin dejar rastros... y quienes tenemos un sentimiento sufrimos pensando que le ha pasado algo. Los amigos virtuales también tenemos corazón y para eso nada mejor que el ejemplo que tú y María nos dieron. Un beso grande.
Siento esta noticia, siento tu dolor.
ResponderEliminarSiempre con palabras amables, cariñosa, enormemente bella por dentro, pura dulzura. Que Dios la tenga en a su lado.
Un fuerte abrazo.
Siento que no entro a menudo como antes en estas paginas donde sen encuentran grandes amistades aunque no se vean. Hoy me siento triste al leer de la muerte de María del Carmen Nazer. Sus participaciones siempre eran preciosas. Pero ella ya está en buen lugar aunque su falta se notará sobre todo en su familia.Un abrazo para todos sus amigos.
ResponderEliminarAcabo de enterarme y .. no tengo palabras para expresar lo mucho que siento que nos haya dejado una persona como era ella ... Un abrazo infinito para ti querido amigo y para ella .. Apapachos siempre D.E.P.
ResponderEliminarMe entristece su partida, pero me llena de felicidad el saber que a través de su poesía y de todo lo compartido en los años de amistad bloguera perdurará en el tiempo y en nuestros recuerdos.
ResponderEliminarPaz en su tumba,
Un abrazo.
Comprendo como te sientes ante la pérdida de esta persona que tanto apreciabas, por desgracia he vivido esta situación en carne propia ya que en el peregrinar por mi blog he perdido tres amigos blogueros....que descanse en paz.
ResponderEliminarBesos
Bellísimo poema, Francisco! Me ha llegado al alma en emoción y nostalgia. Seguramente ya estará titilando en luz su bondadoso espíritu, y eso es lo único que me da consuelo. Todavía no puedo creer que ya no esté con nosotros. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarHola Francisco. Siento mucho lo de tu amiga. La vida es así. Unos nacen y otros mueren. Lo más importante quedarse con las vivencias y recordar la belleza interior de la persona. No estamos preparados para la muerte, y realmente nacemos para después morir. Mi más sentido pésame a la familia y amigos.
ResponderEliminarAbrazosssssssssss
Que tristeza esta hora
ResponderEliminarsi la conocía en todo su dulzor y esplendor de mujer.poeta
se fue a encontrarse con sus amados
y nos legó su verso de alondra
bendita sea su palabra que perdura en cada corazón que supo amarle
siento en tu sentir!
Hasta hoy no he leído esta entrada.María debió ser una persona muy especial a juzgar por el inmenso cariño que emana de tu escrito y de los comentarios. Te acompaño en el sentimiento, Francisco. Un abrazo
ResponderEliminarEl comentario anónimo es mío, Juan Pan. No me deja de otra forma el móvil.
ResponderEliminar¡Qué bonito. Me ha encantado!
ResponderEliminarUn año ya de la perdida de una amiga, de un contacto diario que a ambos nos llenaba de emoción. Ella fue una maestra que se sintió reconocida por sus alumnos ya licenciados y doctores. Estaba dotada de una gran sensibilidad y escribía con el alma en la mano. Cuando supe que estaba enferme, le escribí un poema diario sin otra pretensión que la del amigo que llega sigilosamente de visita a su cabecera del dolor. Al principio leía ella los poemas; cuando ya no estaba en condiciones de hacerlo, se los leía su maravillosa nuera Rossana y ésta me contaba el gran consuelo que para ella suponía. Todo fue transcurriendo así, en ese día a día que se agotaba hasta este último poema escrito a la media hora de haber recibido la noticia de su fallecimiento.
ResponderEliminarDe todo esto, con la ayuda maravillosa de Maite y María Jesús, el libros "Palabras para Beba" que se puede descargar en esta misma página, ubicado en la parte superior de esta página, en el recuadro "Libros Digitales".
Quiero agradecer a todos vuestros cariñosos comentarios y la dulce memoria que guardáis la mayoría de María del Carmen Nazer, "Beba". A cambio de este pequeño esfuerzo de amistad, ella me ha dejado el legado de los miembros de su propia familia.
Un fuerte abrazo a todos.