En algún sitio estamos
juntos,
carnaval de aromas agrestes,
tras trastocarlos y
vestirlos
cómo hieren los sentidos
hasta apropiarte de cada uno
de ellos
con el hábito agraciado de
tu sonrisa.
Hay en mi corazón furia y
quebrantos,
un sinvivir acodado a tu
nombre
que me vincula a ti como uva
al racimo,
como sarmiento a la vid
para que siga siendo verdor
y vida,
pámpano fecundo y anillos
trepadores.
Tú, amiga mía, savia y
nutriente,
que con tu palabra gomosa y
azucarada
vas tejiendo una red
invisible
en la que nos apresas y
alimentas.
En algún sitio, ─digo─
estamos juntos.
La palabra compartida es una buena manera de estar juntos. La magia de la comunicación.
ResponderEliminarYa andamos de vuelta. Un saludo.
De deseo lo mejor, pero celebró que estés por aquí.
EliminarUn abrazo.
Por supuesto tu energía viaja hasta ella día a día.
ResponderEliminarEsa es mi intención, esa es la ilusión.
EliminarBesos.
Hay en mi corazón furia y quebrantos,
ResponderEliminarun sinvivir acodado a tu nombre
que me vincula a ti como uva al racimo,
como sarmiento a la vid
para que siga siendo verdor y vida,
pámpano fecundo y anillos trepadores.
en algún sitio estan juntos ,pero sin duda alguna habiata en su corazón y en su día a día.
Hermoso poema.
Saludos.
Hermosa es quien no se reprime de ver y confesar belleza ajena. Mil gracias.
EliminarUn beso.
Estamos unidos en los anales del universo...Hay un hilo rojo (leyenda china)que une a todas las almas afines y que tarde o temprano terminan encontrándose. Esta historia le gustaba mucho a M.del Carmen...Sigamos unidos y alimentando esa red divina e invisible, que nos eleva en espíritu.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño para ella y para ti, Francisco.
M.Jesús
Claro, las almas de los que se quieren se juntan!!
ResponderEliminarUn abrazo.