Una mujer pasa. Deja de
acariciar la brisa
y las flores del jardín
estiran sus tallos
para no perder detalle. El
jazmín
exhala a toda máquina aromas
de cortejo,
se ralentiza el tráfico
y los motores respiran al
unísono
un ronroneo acelerado. Se ha
parado;
todo se ha parado al paso de
ella,
como imagen de culto y
veneración.
Pasa un hombre. Pasa un
segundo hombre.
Pasan muchos hombres y nada
pasa.
Una mujer pasa. El cielo se
sonroja
y en un suspiro se torna
violeta;
agudizan los ojos la mirada
y todo se oscurece; ladra un
perro
y recibe un tirón monumental
de la correa;
lo efímero se ha hecho
eterno
como una fotografía en
blanco y negro.
Se ha detenido el tiempo.
Una mujer pasa. Dejo de
escribir
para inmortalizar su imagen
en imperecedero recuerdo.
La imagen es "chunga", un hombre mira a una mujer, parece que la vista se dirige al culo, en tanto deja de lado a la pareja con la que está, la imagen es fea. Otra cosa diferente es el poema.
ResponderEliminarUn abrazo.
Te agradezco mucho el comentario, Emilio. La imagen, aunque no es mía, si es mi responsabilidad por haberla puesto; pero tú y yo sabemos que esos casos se dan. El texto va de otra cosa, de admiración y atracción limpia hacia la mujer.
EliminarUn abrazo.
Aunque no nos hemos visto, ya nos conocemos de muchos años, y se que que se te coló esa imagen inapropiada, también te digo que a mi,de vez en cuando, me pasa como a ti, hago o digo cosas inconscientemente que no me gustan y que me afean en casa, aunque hagamos un esfuerzo por eliminar esos gestos, son motivo de una educación machista y a nuestros años y pese a los esfuerzos que hagamos por evitarlos, siempre se nos cuela un gazapo.
EliminarUn abrazo.
Así es, Emilio, pero no me duelen prendas en rectificar.
EliminarOtro abrazo.
Y tu mujer siempre te pilla mirando.
ResponderEliminarY me la gano con toda la razón, Cayetano.
EliminarUn abrazo.
Ese señor de la foto es bastante grosero. Se vuelve para mirar a otra chica cuando está con una mujer. El poema es precioso. La imagen es desafortunada, (perdone usted que le diga sin ánimo de ofender) jeje. (espero que no te lo tomes a mal)
ResponderEliminarTienes toda la razón, María Almeyda. Es mi culpa no haber elegido la imagen más apropiada al texto. No me ofendo, sino que te agradezco de todo corazón tu comentario.
EliminarUn abrazo.
Cómo no he visto la imagen que quitaste sólo opino de la que veo ahora y es una mujer muy guapa.Te agradezco este poema dedicado a la mujer, lo encuentro precioso y escrito de una forma muy delicada.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo. Precisamente por eso cambié la imagen, porque lo que me interesa es centrar la atención en el poema.
EliminarUn abrazo.
Hermoso poema. No la vi, pero tu jamás irías de machista, por ello no le encontraste ese lado. Además mirar la belleza, a nadie ofende. Ni a la que ves, ni a tu compañera.
ResponderEliminarBesos.
Muchísimas gracias, Sara, por tus palabras de confianza en mí.
EliminarUn fuerte y besado abrazo.