04 agosto 2019

PERSEGUÍA NUBES




Perseguía nubes como quien caza fantasmas
inexistentes o sueños imposibles;
siempre ido, como transportado
al mundo irreal de las quimeras, y así
día tras día desde fecha inmemorial.

En sus ojos, siempre un interrogante,
una pregunta sin respuesta, el enunciado
que nunca jamás será resuelto.

Era un zombi, un elemento no clasificado,
un perseguidor de nubes,
el secano del agua derramada
y desperdiciada por el husillo humilde
de las cloacas, era don nadie.

Pero ninguno se molestó en descubrir
la riqueza de sus pensamientos,
los tesoros inauditos y las elucubraciones
con las que los arropa, el lunático
que en lugar de nubes persigue sueños.

8 comentarios:

  1. En la sociedad indiferente y utilitaria, a quién le importa la riqueza interior de alguien.
    Un abrazo de anís de domingo.

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    1. Pues esa riqueza es la que me ha interesado destacar, querida Sara.
      Besos de anís.

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  2. Me gustan los que viven en las nubes, los lunáticos, los nefelibatas, los soñadores, los imaginativos... En ellos siempre vive el alma de un poeta.
    Un abrazo, Paco.

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    1. Me gustan los soñadores mucho más que aquellos que arrastran los pies por la tierra palpando qué pueden arramplar.
      Un abrazo.

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  3. ".. Mas él alzó sus sueños hacia el cielo y poco a poco, fue ganando altura, y los demás, quedaron en el suelo guardando la cordura.."

    Un inclasificable abrazo

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