Todavía es de noche. Domingo
de esta segunda mitad de
enero
que gira entre días fríos y
luminosos
y otros lluviosos y
desangelados.
La ciudad duerme. De
repente,
como una pesadilla,
te haces protagonista de mis
desvelos;
me acerco a la cama y
todavía duermes,
hasta te ilumina una sonrisa
que no sé interpretar y me
tranquiliza.
He sometido mi vida a tu
vida,
como prendida en las
corcheas y fusas
con que Manuel de Falla
hilvanó el Amor Brujo,
ese embrujo que a ti me
subordina.
Bonito despertar.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Es bonito contemplar el rostro de la persona amada mientras duerme.
ResponderEliminarUn saludo
No hay un mejor despertar.
ResponderEliminarUn abrazo de domingo a las 7:24
Y bendito embrujo, no es para menos, ella tiene una belleza especial...♥️
ResponderEliminarBendito embrujo el de Falla.
ResponderEliminarPor lo que veo, la acabas de componer.
ResponderEliminarBien fría que está la noche y sobretodo el viento, que no deja de soplar....en casa, es como mejor se está.
Besos
Bello poema y más bello ese sentimiento que trasmites.Saludos
ResponderEliminarDivino poema y sentimiento.
ResponderEliminarUn abrazo.
Poema precioso y sentimientos más preciosos todavía-
ResponderEliminarBesos
Hermoso despertar sintiendo amor. Bellas letras amigo Francisco. Saludos.
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