Me empuñaron la Espada al nacer,
pero ni lo alcancé,
ni tengo fuste de héroe.
Mi padre me enseñó a gozar
de la lectura
y ésta fue nutriente de la
imaginación,
aunque en ese terreno no he
consolidado
grandes gestas, esos
imposibles
que tanto distan de mi
personalidad,
tal y como a mi poquedad
corresponde.
Lo mío es un pasar de
puntillas,
desapercibido; en la baja
tonalidad
donde no hacen escalas
tenores y barítonos.
Al viejo que ahora soy
le están grandes las
charreteras
del éxito nunca buscado ni
alcanzado,
aunque confieso que voló mi
espacio aéreo
en alguna noche de insomnio.
Todo lo que espero hoy y en
adelante
es empequeñecer, ser
coherente
con la merma consustancial a
la edad
y con mi contrastado nada y
vacío.
Me imagino que te refieres a empequeñecer físicamente, algo que no podemos evitar, pero no tenemos que hacerlo en otros ámbitos de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo y eleva el ánimo que te lo veo mermado.
Me refiero a la merma en general que se va generando y también a una valoración propia no hinchada.
EliminarUn abrazo, Emilio.
Nada de humildad, Paco, aunque el sentimiento te honra.
ResponderEliminarTú vales mucho. Te lo dice un experto en espadas.
Un abrazo.
Hasta jugando a las cartas soy un desastre, Cayetano.
EliminarUn abrazo.
Puede que pases por la vida de puntillas, pero de baja tonalidad nada, tú eres brillante y eso no tiene edad.
ResponderEliminarFeliz año nuevo
Abrazos
Te prometo, Julia, que no he buscado el aplauso fácil, es mi actitud ante la vida. Muchas gracias.
EliminarAbrazos.
escribes muy bonito
ResponderEliminarTe lo agradezco mucho.
EliminarUn abrazo.
Cro que cuando se crece y uno se vuelve mas viejo depende de como piense el cerebro, te sentirás. Tratemos de ver lo positivo
ResponderEliminarEres un gran poeta
Saludos desde Miami
De Miami a Sevilla he trazado un puente, donde "Recomenzar" cada día pasos que nos acerquen.
EliminarUn abrazo.
A medida que pasan los años nuestros sentimiemntos y haceres van por otros derroteros de cuando éramos jóvenes.Saludos
ResponderEliminar¡Ya lo creo, Charo! Yo me dediqué a la hostelería y eso quedó muy atrás.
EliminarUn abrazo.
Eres humilde.
ResponderEliminarEscribes muy bien respetando el idioma y eso a mí me encanta.
Eres un gran poeta Francisco.
Un abrazo grande.
En ti suena aún más grande las palabras que me dedicas, Luján. Muchas gracias.
EliminarUn fuerte abrazo.
Nos has dado lo mejor en tus letras y sentimientos, Francisco. El verdadero éxito es llegar al corazón de la gente y tú lo has conseguido con sencillez, imaginación y humildad.
ResponderEliminarMi abrazo y mi ánimo, amigo.
Tienes un dardo por palabras, María Jesús, y siempre haces diana agradecidísima en mí, María Jesús.
EliminarUn fuerte abrazo.
Tienes facilidad para escribir y es un don que tienes. Escribes desde la humildad y es lo que te hace ganar el corazón de la gentes.
ResponderEliminarBesos
Sabes que no tengo interés en ser nada más que esto que soy: creerme poco y ser aceptado por personas generosas como tú.
EliminarBesos.
Eres un gran poeta aunque tu humildad no te deje reconocerlo, cosa que por otra parte te honra y además ¿para qué sirven los oropeles? tú mejor que nadie sabes que son una falacia.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte poeta y arriba el ánimo.
En esa falacia es la que no me quiero ver engullido, Tracy.
EliminarUn abrazo.
Eres un gran poeta y amigo, eso te hace brillar,. Un placer leerte amigo Francisco,. Saludos.
ResponderEliminarGracias, Sandra, por tus muchos estímulos.
EliminarUn abrazo.