26 noviembre 2010

EL ATRACÓN Y SUS CONSECUENCIAS

El X Encuentro Internacional sobre Poesía del Siglo de Oro ha sido un verdadero atracón para el intelecto, tal como era de esperar, conociendo las pautas de los nueve que le precedieron. Si el encuentro anterior fue dedicado al Canon Poético del Siglo XVII, en esta ocasión ha sido La “Idea” de la Poesía Sevillana en el Siglo de Oro, un estudio pormenorizado sobre el Parnaso sevillano, cuyos fundamentos están en el erudito Juan de Mal Lara y su cúspide le corresponde, a pesar de sus detractores, al divino Fernando de Herrera.


A la vista de las conclusiones editadas de los encuentros de años anteriores, -el último tiene 500 páginas-,  resultaría una tarea imposible extractar aquí lo oído en estos tres intensos días en unas cuantas líneas y que resultara de utilidad para quien lo leyere, pero baste con decir que más que satisfecho he quedado plenamente complacido, al tiempo que he sacado una buena lista de curiosidades y lecturas sobre las que indagar.

A la satisfacción intelectual se ha sumado una porción nada desdeñable de vanagloria cuando la profesora que ha dirigido al grupo investigador me ha mencionado en el acto de clausura, en los agradecimientos, sin que mis méritos sean otros que la asistencia continuada y atenta: “mi especial agradecimiento a Francisco Espada, alumno que fue y nos acompaña siempre…”   El halago no se había completado con la mención amable por mi tenaz presencia, sino que he sido invitado a participar en la comida con la que despidieron a los ponentes.

Sigo aún azorado por este regalo intangible e inconmensurable, premio inmerecido que se debe sólo al afecto de la Dra. López Bueno para conmigo, y que ha sido refrendado por el resto de doctos comensales con la bondad de hacerme sentir entre iguales en mi desigualdad. Créeme, lector; si lo cuento aquí, no es por jactancia, sino para hacerte partícipe de mi dicha.

6 comentarios:

  1. Comprendo tu satisfacción, seguro que si se alegran de tu presencia es por algo de lo que puedes estar orgulloso. Alegrías da la vida cuando las mereces. Beso.

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  2. No seas tan modesto. Estoy segura, que la distinción que te ha hecho la profesora, ha sido por algo más que el cariño que te profesa. Y si, te puedes vanagloriar de ese halago público y notorio, ¿qué mal hay en ello?, ¿porqué nos tenemos que sentir culpable por enorgullecernos, por sentirnos satisfechos por un halago proveniente de una persona reconocida?.
    Yo nunca he recibido ninguno, pero te apuesto lo que quieras,(es una manera de hablar), que si algún día recibo alguno..., la verdad, no se si podría callarmelo.

    Y ahora una pregunta, ¿conoces la obra de Adriano del Valle? no tienes por que contestarme aqui, lo puedes hacer a mi dirección de correo, y así, yo también te explicaré por que te hago esta pregunta.

    Un fuerte y calido abrazo

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  3. Me uno a las apreciaciones que hace Nerim...

    Mire usted, caballero, yo estoy gratamente sorprendida, y por tanto, encantada, de haber descubierto (más bien fue usted quien me encontró primero) su blog, y por ende sus letras, su manera de pensar y éstos sus días de aplomo.
    Me gusta cómo escribes, amigo Francisco, muy, pero que muy bien, además eres conciso y llegas.

    Porqué no enorgullecerse, como dice nuestra común amiga? Pues ea, a ponerse contento,y a disfrutar!

    Un abrazote!

    Ah, y sigo pensando que "qué envidia!" con lo del encuentro de poesía! Ayyys!
    ;)

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  4. Sabéis que no suelo comentar los comentarios, pero en esta ocasión me veo forzado a ello. Os agradezco mucho las muestras de afecto. Nos conocemos sólo de encontrarnos en esta escalera comunal, leernos, saludarnos y dejar que en ese trato a distancia germine el afecto. Y es que sin relación no somos nada. Si algún sentido tiene colgar en este muro franqueable notas, sentimientos, imágenes, poemas, reflexiones... es buscando al otro, buscándote. Una búsqueda que es una necesidad de comunicación que por fortuna se me satisface. Gracias a las tres, y a los posibles comentarios que restan, por disfrutar conmigo este trocito de gloria. Y recuerda, todo esto es posible porque tú estás al otro lado, porque tú eres el motivo y la fuerza motriz que me empuja a estar presente cada día: nunca me miro en las puertas; si lo hago en el espejo es porque me devuelve la mirada. Tres besos tres.

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  5. Llego tarde?...

    Y tu emoción la hago mía, me alegran tus alegrías y los buenos momentos que te regala la vida, disfrútalos amigo!

    Y yo hoy te dejo tres veces tres, besos!

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  6. Mi enhorabuena por la mención, que si la hicieron por algo será. Supongo que en esas jornadas los sonetos habrán sido el pan nuestro de cada día ¿no?

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