Gentileza de Maite Sánchez, "Volarela" |
“¡Levántate
amada mía, hermosa mía, ven a mí!”
(Ct 2, 10)
Como
la subida al Gólgota,
la
vida nos hostiga
con
las ballestas del mal
y
nos dejan cicatrices
en
el alma,
donde
la piel
ni
siquiera sufre un rasguño
al
que poner ungüento
ni
pócima mágica.
¡Ay,
las heridas del alma,
amada mía, hermosa mía,
la
ausencia definitiva a la edad
de
los albores
y
la maternidad con sus derivadas
de
cercanía y distancia!
¡Ay,
los errores de la prole!
¡Ay
los castigos y privaciones!
¡Ay
de los corolarios!
¡Ay
las infidelidades a tus miembros!
¡Ay
los tozudos tortuosos tormentos!
Tu
vida es un ay apagado
y
apenado,
un
lamento maquillado de poesía,
de
aromática quejumbre
hecha
silencio.
En
tu voz cantarina in-corriente,
un
lastre de cicuta
te
bisela el alma
con
el acero templado
del
destemple.
Un
día serás noticia y olvido
generalizado;
pero
a los tres, a tus tres,
a
la una, a las dos, a los tres,
se
nos tatuará
la
desazón y el gozo
de
tus cicatrices de jade.
Porfa... dime algo de Mª Carmen.
ResponderEliminarTracy querida: ya te respondí ayer y ahora voy a repetir en el siguiente comentario bajo este. No es un buen momento para la amistad.
EliminarBesos.
Bonito homenaje que haces a una amiga que, por lo que veo y leo, tiene el bonito hábito de la escritura creativa.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Todo eso y tocada por la enfermedad y postración. Por eso, todos estos días sigo la misma motivación, Cayetano.
EliminarUn abrazo.
Todos subimos poco a poco al Gólgota, cargando la mochila de la vida...Y en ese ascenso se nos examina cada día del amor, ese amor que va dando forma a las alas del espíritu para emprender algún día el vuelo definitivo...Mientras, disfrutamos de la "desazón y el gozo"de tus letras, que vuelan cada día como una oración y una muestra de amor.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo.
M.Jesús
Creo que a veces acierto con las letras, pero siempre le pongo buena disposición. De la desazón al gozo, el camino de la vida es un pendular de altibajos que no podemos dejar de vivir con pasión.
EliminarBesos.
¡ Ay las heridas del alma!
ResponderEliminar¡ Ay cómo duelen!
Un fuerte abrazo Paco .
A nuestras edades, aunque las señoras son siempre jóvenes y bellas, ya son muchas las heridas y tenemos experiencias desde las que hablar, Chelo.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muy reflexivo este poema. Coincido con Mª Jesús. Con amor, esperanza y amigos así de entregados, el peso es mucho más ligero.
ResponderEliminarSeguro que se siente comprendida en tus letras, algo tan bello y bueno para el alma...
Un abrazo grande :) (y me encanta acompañar con nuestro dibujo tu post, y es nuestro porque su libro de algún modo forma parte de todos nosotros.)
Esto es una obra común, Maite: "a la una, a las dos, a los tres". Tengo dudas del valor literario, pero no del sentir humano, del latido de la amistad.
EliminarBesos.
Un desgarrado lamento es tu poema. Me entristece saberla enferma, pero me alegra ver su libro y leer tus dedicatorias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Rafael, por tu comentario cómplice. Seguro que le llega a ella y se sentirá muy contenta.
EliminarUn abrazo.
Heridas y luchas es lo que es el vivir para algunos...
ResponderEliminarBesos
Creo que para todos, Inma_Luna. Antes o después todos pasamos por momentos difíciles.
EliminarBesos.
La vida es un camino lleno de obstáculos...las heridas del alma son difíciles de curar aunque en la mayoría de los casos el paso del tiempo hace disminuir ese dolor...no conozco a Mª Carmén pero pienso que es una persona muy especial y a la que deseo que tenga alivio en estos malos momentos.
ResponderEliminarBesos
La vida nos deja cicatrices en el cuerpo, en el corazón y en el alma.
ResponderEliminarEs el precio que pagamos al nacer por vivir.
Nacemos con dolor y morimos con dolor... en el camino de la vida hay rosas y espinas.
La felicidad es esfímera, igual que la vida.
Salud para María del Carmen.
Besos, versos y flores.
MA.
El blog de MA.