En el silencio,
la luz cenital es presencia viva,
comunicación traslúcida que colma
hablando por signos al interior,
para quien se deja comunicar;
habitáculo transparente
donde se trasciende a ciegas.
El tiempo dormita en pausa inexplicable:
no sé, no puedo justificarlo,
pero me colma de serenidad silente
y me siento abrazado y abrasado.

Luz igual a vida. No me extraña que te sientas bien con ella.
ResponderEliminarSaludos.
Silencio y reflexión, dos grandes curativos.
EliminarUn abrazo.