12 agosto 2018

TEMPORAL





Antes de que soltara el viento su anclaje
inflando ambos carrillos
como un niño con globos de colores,
se descorrió la cortina de nubes
que presagiaba temporal;
a las primeras ráfagas,
se arremolinaron las hojas
en una espiral indecisa
que no atinaba dónde posarse;
dos sombreros y tres pamelas precedían
la marcha acompasados por los soplidos
y los peines perdieron su eficacia;
hasta un peluquín sin dueño reconocido
hizo un par de escorzos antes de desaparecer;
las faldas perdieron su eficacia
y todo y todos la verticalidad,
inclinándose para ofrecer menos trapo al viento.

Sobre los cristales,
una artillería de restos vegetales,
partículas de arena y tierra,
imprimiendo rotundidad en el redoble.
A poco, era la lluvia la protagonista
y un apagón eléctrico
tiñó de tétrico el anochecer.

Las calles desiertas,
fantasmales, arroyos improvisados,
afluentes entre sí en la próxima esquina
y una desolación generalizada
orquestada por el viento.

6 comentarios:

  1. Creo que hay pocas cosas que sean más antipáticas que ese viento desaforado que va acompañado de partículas de arena y polvo en suspensión.
    Un abrazo, Paco.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo cierto es que no estamos preparados para ello. Sí, Cayetano, es realmente molesto.

      Un abrazo

      Eliminar
  2. Hermoso homenaje a ese director de orquesta, que es el viento...El llega de vez en cuando para dar un paréntesis en nuestro ajetreo diario...Nos calla y nos habla con todo su ímpetu, recordándonos que, la fuerza y la sabiduría de la naturaleza están por encima del hombre y su ciencia...Deberíamos tomar nota de ello.
    Mi abrazo y feliz domingo, Francisco.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Qué hermoso y qué suerte contar contigo cada día, María Jesús. Muchísimas gracias.

      Un fuerte abrazo.

      Eliminar
  3. Así han estado acá los días está semana... bellos.
    Desolados de sol más mo de desolación. Hay alegría y te la comparto en este abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El tiempo anda un poco loco, Sara, pero lo disfrutamos en todo caso y es lo mejor que podemos hacer.

      Un abrazo.

      Eliminar