La luna se ha derramado con
derroche
y el cielo es un ascua de
luz selenita
que todo lo empapa y
emborriza.
Un gato maúlla en el
alfeizar
de la ventana del ático y
una sombra chinesca
emula torpes movimientos del
cine mudo.
Noche de verano, noche
intensa
de sudor e insomnio. Los
grillos
deben pensar que es medio
día
y emiten sus notas agudas y
prolongadas.
No es noche de dormir, sino
de soñar
despiertos; una vigilia
impuesta,
un espectáculo de luz y
sonido
que tiene celos del agua.
Por suerte, el ventilador es
silencioso,
como esta queja mía, escrita,
para que ni siquiera se me
oiga.
La luna llena se ha
derramado
y todo es un derroche.
Hola Francisco. Bello poema. La luna se ha escondido derramada tras las ramas para que éstas le den aire para aliviar el calor que hace. Si se te oye.
ResponderEliminarAbrazossssssssss
Has descrito bellamente lo que es una noche de insomnio. Será que la luna nos invita a soñar contemplando el gran espectáculo de la noche bajo la luna y su corte de estrellas...
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Si esa es una queja, mi amigo...benditas sean tus quejas de insomnio.
ResponderEliminarUn abrazo con cariño.