22 febrero 2018

INVERSIÓN




Sobre las limitaciones físicas
de la estación fría,
se va posando una pátina
de soledad
que atasca el tránsito de los días
haciendo amalgama viscosa,
densa como la niebla
de este panorama
que sueña primavera.

12 comentarios:

  1. Con un invierno intenso, ya soñamos con la primavera para remediar los dolores.

    Un abrazo.

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    1. Pero la primavera a la que me refiero no volveremos a ella, Emilio.

      Un fuerte abrazo.

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  2. Ya llegará, Paco. Y con ella, el polen, las alergias y los puñeteros insectos. No, si luego echaremos en falta el frío.
    Un abrazo.

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    1. Ayer, sin ir más lejos, un mosquito cebado en mi dormitorio que sonaba como un reactor, mientras yo tiritaba de frío. Ya no hay ni que esperar a las estaciones.

      Un abrazo.

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  3. Aún en la soledad... con frío y nieve, podemos soñar y revivir la primavera deseada. El pensamiento es poderoso y actúa sobre tus deseos. Tu poema, Francisco, encierra muchas opciones y, mi cometario también.
    Un abrazo, gusto de leerte otra vez.

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    1. Traté de hacer un poema condensado en extensión y con pretensión plurisignificativa. Muchas gracias por tu palabras, Ceciely.

      Un abrazo.

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  4. Yo estoy gozando de unas temperaturas cálidas, en tierras malagueñas, aquí me vine a celebrar mi cumpleaños que fue el 20 de febrero, ya mismo estoy dd regreso .

    Besos

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    1. Que disfrutes mucho de mi costa. Cuando cierro los ojos, ese es el mar que imagino, el que me vio crecer.

      Besos

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  5. Pasamos nuestra primavera tan rápido que luego nos gusta echar nuestra mirada hacia atrás al llegar al otoño o al invierno de nuestra vida. Y la de la estaciones, querido Paco, que ya llegue.
    Fuerte abrazo.

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    1. Es cierto que me gusta echar la mirada atrás, pero no volvería atrás si ello fuera posible. No he tenido una vida ideal, pero no puedo ni imaginar mi hoy con 20 años.

      Un fuerte abrazo, Sara.

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  6. A veces la primavera se acomoda en nuestro interior,queriendo salir a flote...pero no siempre es bueno.Saludos

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    1. De algún modo, vivimos atrincherados en la primavera, aunque envejeciendo a lomos del resto de las estaciones. Muchas gracias por tu comentario, Katiuska,

      Un abrazo.

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