16 octubre 2015

LA PAZ OS DEJO



La paz os dejo, mi paz os doy.
(Jn 14, 27)

A ti grito, Señor, a ti imploro.
¿En qué hemos malbaratado tu paz?
¿Cómo hemos destrozado tu legado?
¿Con qué indignidad hemos tullido
nuestros despiadados corazones?
¿Qué cera es esa que nos aísla,
que nos desliza, nos escurre y embarranca
por la pendiente sin freno del egoísmo;
del odio que aniquila, de la ambición insaciable,
desentendiéndonos del otro, impidiéndonos oír
los quebrantos y lamentos de todo y de todos?

Desde la mandíbula de burro,
desde el primario golpe atinado de Caín,
hemos progresado tanto
que ya somos diplomados cainitas,
pero con idéntica infame motivación.
Es verdad que más sofisticados:
piedra, bronce, hierro, pólvora, drones…
y siempre la desgarrada garra de la guerra:
no vivir en paz y no dejar vivir en paz.

Tú hablas de amar, nosotros de odiar;
tú de compartir, nosotros de acaparar;
tú de servir, nosotros de someter…
Alguna nota se nos ha quedado distraída
en los renglones de nuestro pentagrama.
Alguna incógnita no hemos sabido despejar
y debe haber una equis irresoluta
enquistada por algún insospechado rincón
y hemos imaginado que la paz sólo llega
tras la muerte. ¡Descanse en paz!;

¡La paz! ¿Paz? ¿Qué paz?
Cuando nos repugna la sangre,
desenvainamos la mordaz espada
de viperina y vilipendiosa ejecutoria,
el gozo impune en el mal por el mal:
matar con vida, para morir sin paz.

La paz os dejo, mi paz os doy,
para que seáis, para que seamos,
─en la medida de nuestras fuerzas─
enérgicos instrumentos de paz.

26 comentarios:

  1. ¡Cuánta razón tienes Francisco en la estrofa de tu entrada y en este poema que, aunque no firmas sospecho tuyo!
    Aunque estemos en la última etapa de la vida, habiendo nacido durante una larga y dura postguerra , nos toca despedirnos de este adolescente y alocado siglo con augurios más tétricos si cabe, que los conocidos durante toda nuestra vida. Tal vez por eso, precisamente, nos conviene mirar y admirar todo lo bueno que todavía nos queda, que no es poco.
    Un saludo cordial.
    ANGALU
    www.acueductoazul.blogspot.com

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    1. Te doy gracias por tu comentario, Angalu, muchas gracias. No soy ni quiero ser prepotente, pero en este blog todo lo que publico es mío, escrito por mí. Cuando nos volvemos mayores, las fuerzas que faltan para las actividades físicas, se remansan en la reflexión, y eso es lo que intento hacer. Gracias de nuevo.

      Besos.

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  2. ¿Que paz?, nos han educado en la pura ley de la selva, no somo o no queremos ser instrumentos de paz, ojalá así fuera.

    Un abrazo.

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    1. Tienes razón, Emilio, pero cuando uno tiene claro que ese es el camino, no de puede tirar la toalla.

      Un abrazo.

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  3. Me gusta siempre leer entre líneas en cada uno de tus versos, porque está esa huella, tu sello de aquello que no escribes, pero que gritas... lo alzas hasta lo más alto. Esa profundidad, ese clamor del que nos hablas, esa paz que en realidad no existe. Estamos envueltos en una vorágine de egoísmo, nos damos golpes de pecho, mientras nos quedamos quietos ante las injusticias... hoy me quedo reflexionando.
    Abrazos compañero de letras.

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    1. A esta altura de la vida, uno es la colmatación de lo que ha ido aprendiendo en los estudios, en la universidad de la vida, en las lecturas, en el teatro, en el cine, en los conciertos, en las exposiciones...

      Aprendí algo muy importante en el teatro, hace muchos años, cuando vivía en Madrid. En "El gigante de la montaña", Pirandello retrató la condición humana y reflexionó acerca del papel del artista en la sociedad. La acción enfrenta dos mundos: el de los restos de una compañía de cómicos y el de los extraños habitantes de una casa llamada "La Scalogna" (la desgracia). Pero pronto se ve que el enfrentamiento real es otro: el del arte contra la sociedad, que va a tener lugar en las cumbres donde habitan los gigantes, que nunca se dejan ver y no comprenden el arte (parece claro que simbolizan al fascismo de Mussolini).

      Por debajo de la trama estaba el Teatro, así, con mayúsculas. Para el autor, en boca de sus personajes, la obra no es el libreto, ni la dirección escénica, el montaje, la iluminación, el vestuario; sino la idea que se forma en la mente de cada espectador. Lo que significa que hay una obra original para cada uno de los espectadores, como la hay para cada uno de los lectores. Ya que el mensaje que recibo o leo, lo revisto con mi YO, lo hago mío y viene a formar parte de mi acerbo.

      Podría tener mil lectores, un ciento de comentarios loables, pero ninguno me satisface tanto como este que me hace hablar de mis conceptos. Siempre escribo entre líneas, siempre hay bajo el envoltorio formal la "ropa interior" que va pegada a la piel.

      Gracias infinitas, Ángeles, porque un poema son unas escasas líneas breves, pero si luego lo meditas como tuyo puede darte para mucho más que ese breve tiempo de lectura.

      Un fuerte abrazo.

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  4. Y sobre todo, cómo es posible que algunos encargados o intermediarios de ese mensaje de paz al que aludes fomenten todavía más el odio, la inquina, la desconfianza, lanzando mensajes repletos de xenofobia y falta de humanidad hacia inmigrantes y refugiados, alejándose del genuino mensaje cristiano, ese que compartimos incluso muchos que no somos creyentes. No hay más que echar un vistazo a las últimas declaraciones de alguno.
    Un saludo.

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    1. Te contesto, Cayetano, con palabras de Jesucristo, recogidas por el evangelista san Lucas, (Lc 11,42-46)

      ¡Ay de vosotros, fariseos! ¡Ay de vosotros también, maestros de la Ley!. ¡Ay de vosotros, fariseos, que pagáis el diezmo de la hierbabuena, de la ruda y de toda clase de legumbres, mientras pasáis por alto el derecho y el amor de Dios! Esto habría que practicar sin descuidar aquello. ¡Ay de vosotros, fariseos, que os encantan los asientos de honor en las sinagogas y las reverencias por la calle! ¡Ay de vosotros, que sois como tumbas sin señal, que la gente pisa sin saberlo! Un jurista intervino y le dijo: Maestro, diciendo eso nos ofendes también a nosotros. Jesús replicó: ¡Ay de vosotros también, juristas, que abrumáis a la gente con cargas insoportables, mientras vosotros no las tocáis ni con un dedo!

      A la palabra de Jesucristo, no tengo nada que añadir. Un abrazo.

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  5. Hoy en día la paz es que yo creo que es una utopía, hasta con el vecino hacemos guerra. Un besazo.

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    1. La utopía es el motor de la vida, Tamara. Sin utopía nadie emprendería una investigación, ni siquiera científica. Yo sigo sin ver por mis ojos que la Tierra es redonda, pero el navegante Colón así lo creía y fue a por especias a la la India navegando hacia el poniente. No es cosa de extenderme, pero tú, chica lista, ya sabes lo importante que es la utopía: no lo de creernos un cuento, sino que por medio de la ilusión, de los sueños, llegar a donde no imaginábamos.

      Un besazo.

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  6. De veras creo, Francisco, que la única paz que podamos obtener, para desgracia nuestra, es la del descanso final...
    Me duele decirlo, hasta la médula me duele, porque no presiento un futuro maravilloso, a veces, me da miedo hasta que no exista un futuro, con tantos que vienen detrás esperanzados...
    He decidido no pensarlo, pero a veces, se me viene todo el dolor del mundo de golpe...
    Besos.

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    1. Quiero soñar, Marinel, que la paz debe nacer desde una actitud personal. Quiero imaginar un guijarro en un estanque, una primera onda que nace en la propia piedra, pero que se contagia una y otra vez hasta los límites. Como posiblemente diga el poema, la paz es muy difícil, tanto que lo contrario es la constante desde los inicios del hombre hasta la actualidad; pero todos los sueños nacen de una única persona que paulatinamente va contagiando, no por trasmisión, sino por imitación. Quiero soñar que la paz a la que aspiro, tiene posibilidades de pervivencia.

      Besos.

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  7. El hombre está lejos de Dios y de los valores humanos, Francisco...Adora al becerro del materialismo y todo lo que conlleva de ambición, egoísmo y soberbia...La paz es amiga de la humildad y mientras el hombre no reconozca sus fallos humanos y la grandeza de su espíritu, seguirá cerca de la guerra, del rencor y de la locura...La paz sigue siendo una utopía y no nos queda más remedio que seguir luchando por ella.
    Mi abrazo y mi ánimo, Francisco.
    M.Jesús

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    1. Me resulta muy atinado lo que dices, María Jesús, tanto que no merece la pena que lo repita, si es que no lo decía de otra forma en el inicio. Por supuesto que todo deriva de la misma causa por la que murió Abel. Hubo en el siglo XX un santón con reconocimiento universal que bajó las manos ante las amenazas, que puso la otra mejilla a quienes le maltrataban, y logró sus objetivos con la no violencia: Mahatma Gandhi.

      Efectivamente, la paz sigue siendo una utopía, pero toda utopía deja un resquicio para soñar y necesitamos seguir soñando. Cuando yo era un niño, sonaba en la radio: "la maté porque era mía". Hoy el hombre sigue cometiendo repugnantes violencias contra la mujer, pero hemos logrado algo muy importante: ahora está mal visto. Sigamos soñando.

      Besos.

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  8. Yo sé que todo está vuelto patas arriba. No vivo en una burbuja.También sé que la paz está bien lejos . Pero a pesar de todo no quiero perder la fe. No quiero partir sin dejarle a mis nietos un mundo donde de a poquito la paz se convierta en una realidad. Rezo para que "en el camino se vayan acomodando los melones"
    Volvamos la mirada a Dios y roguemos que aclare . Dicen que después de la negrura viene la luz. Tengamos fe.
    Apapachos.

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    1. Cojamonos de la mano, voceemos imaginariamente por las calle las consignas que no podemos salir a gritar, pero sigamos soñando en dejar a quienes nos suceden un mundo más limpio, más amoroso, más humano.

      Pongamos nuestro granito de arena y, aunque no veamos colmado el proyecto, seremos personas de paz.

      Repite conmigo las palabras de san Francisco de Asís:

      Señor, haz de mi un instrumento de tu paz.
      Que allá donde hay odio, yo ponga el amor.
      Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón.
      Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión.
      Que allá donde hay error, yo ponga la verdad.
      Que allá donde hay duda, yo ponga la Fe.
      Que allá donde desesperación, yo ponga la esperanza.
      Que allá donde hay tinieblas, yo ponga la luz.
      Que allá donde hay tristeza, yo ponga la alegría.

      Apapachos

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  9. Pocas veces te he visto tan sumamente cabreado y con tanta rabia contenida y el tema es para eso y para más, lo que pasa es que escrito con esa técnica depurada,parece aún más grave yodo lo que refieres
    Somos fieras deseosas de sangre, como si tantos años de civilización sólo hubieran servido para refinarnos en el arte de matar.
    Un abeazo

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    1. ¿De veras crees que es así? He debido transmitir muy mal, porque nunca he estado más sereno y reflexivo, Tracy. En todo caso, como asegura Pirandello, esa es tu versión y es para ti la válida y no te la voy a rebatir.

      Creo que no te falta razón en ese progreso y refinamiento para matar desde la piedra al drone, pero confío en que sepamos despertar a ese ángel bueno que coexiste en cada uno de nosotros, a quien la maldad, de momento, le saca ventaja. Esperemos que algún día se levante y haga la vida en sociedad más luminosa y agradable.

      Un abrazo.

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  10. Francisco, tu poema está hecho a la medida de mi patria... la paz no llega, el pueblo sufre y espera alguna noticia positiva de quienes dialogan en la Habana.

    Un abrazo.

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    1. No es que esté hecho a la medida de tu país, Rafael, sino que es un asunto universal. Ojalá cuanto antes se imponga la paz en todos los pueblos de la tierra.

      Un abrazo.

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  11. Pues ... A abrazarnos, hermano, porque debemos de seguir creyendo que el amor será siempre más fuerte que todo. Duele mucho lo que vivimos a diario, pero debemos confiar hoy más que nunca, en lo superior. Qué nada apague la confianza!!

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    1. Si nos dejamos vencer por la desesperanza, ya estamos derrotados. Hay que soñar y hay que poner cada quien su granito de arena. Si de lo que no se habla no existe, que se dice en esta era de las telecomunicaciones, el mero hecho de hablar de este asunto ya tiene sus efectos positivos. Confianza y Esperanza.

      Un fuerte abrazo.

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  12. Maravillosos versos que nos hacen rellexionar sobre un legado que debía ser luz y camino y le hemos tirado a un alud sin fondo. Me duele en el alma tu entrada, porque está llena de verdad... y esa verdad ha sido tapada por rencores, egoismos, guerras y violaciones.

    Es cierto que nos ataña a todos lo que está ocurriendo hoy en nuestro mundo y si cada uno pusiésemos un grano de trigo... haríamos realidad el axioma que dice...
    UN GRANO NO HAACE GRANERO, PERO AYUDA AL COMPAÑERO...
    ¡La esperanza que necesitamos podemos activarla con un pequeño gesto de amor, que sería ese grano de trigo.

    Un abrazo con mi cariño.
    Ángeles

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    1. Gracias Ángeles por tan sentido comentario. No me duele que te duela, ya que es el dolor de todos lo que busco, comenzando por el propio. Esta vida no es para vivirla en soledad como un anacoreta, sino para vivirla en sociedad. Entre los animales vemos bellos ejemplos de cooperación: las hormigas, animales pequeños que sólo pueden hacer pequeñas cosas, pero no de manera aislada, sino bajo un patrón común.

      Un abrazo cariñoso.

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  13. "Alguna incógnita no hemos sabido despejar
    y debe haber una equis irresoluta
    enquistada por algún insospechado rincón"

    Sí, así debe de ser. No hemos sabido resolver nuestra ecuación...
    Si hacemos una media de personas felices consigo mismas, equilibradas, generosas, amantes, entregadas, en paz... saldrían muy pocas y la media bastante baja... En nosotros domina el desequilibrio y el mundo externo es reflejo de esa media general de la humanidad. No muy alta... pero a pesar de todo creo que el ser humano no parará hasta crecer y encotrar su "x"; su amada e ignorada esencia... que es la Paz.

    Un sensacional poema que remueve la conciencia, irritado, feroz, fantástico.. como debe ser; porque tomar conciencia es lo primero para poder cambiar.

    Un abrazo grande :).

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    1. Me emociona tu comentario, Volarela. Ya he comentado demasiadas cosas en cada una de las respuestas y siento muy recompensado de mi esfuerzo. Gracias infinitas por lo mucho que dices.

      Besos.

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