10 octubre 2012

FERIA EN OJÉN


El almanaque suele ser un tirano que preside la pared desde la que nos observa, vigila y hasta nos acusa de las promesas no cumplidas, de los plazos y sus prórrogas, de lo soñado e inmaterializado; pero también nos habla de los acontecimientos, fundamentalmente del ciclo de aquellos que se producen siempre en las mismas fechas. Por eso, del 9 al 12 de octubre, ya pueda estar mi cuerpo en el lugar más apartado de la tierra, en el más paradisíaco o mundano, con grandes adversidades o rodeado de todos los placeres, mi mente y mi corazón están por esos días en Ojén.


Decía Ramón Llull que: “el amor nace del recuerdo, vive de la inteligencia y muere por el olvido”. Mis circunstancias me han hecho vivir más tiempo fuera que dentro de Ojén, pero mi memoria hace que perviva en mí para siempre aquella lejana infancia y juventud donde cada uno de los rincones de mi pueblo, su blancor, sus aromas, sus gentes, no me han abandonado nunca y con todos ellos hago una amalgama en la que seguir estando en Ojén a capricho en todos los instantes fundamentales, como ahora en el caso de la feria.

Mi pueblo me hizo el honor de nombrarme pregonero de feria en 1993, siendo teniente de alcalde y delegado de fiestas mi recién desaparecido amigo Juan Sánchez, que Dios guarde en su divina presencia. Como quiera que la feria llega siempre en el comienzo del otoño, es frecuente que la visite la lluvia, con el deslucimiento consecuente. Por eso, en aquella ocasión pregoné, y también hoy, la siguiente plegaria:
San Dionisio Aeropagita,
tú que en Atenas naciste
—allá en la lejana Grecia—
y que al Aerópago, tu barrio,
le debes el sobrenombre;
te pido que no nos falte
aunque tampoco nos sobre.

Tú, que de la iglesia primitiva
fuiste filósofo cumbre,
—hermoso a los ojos de Dios—
deja que por estos días
con fuerza el sol nos alumbre.
Con fervor te lo pedimos:
Haz que el cielo no se nuble
. . .

En un pregón ya sabemos que se trata de cantar los amores y emociones de aquello que se celebra y decir fundamentalmente lo que la gente quiere escuchar. En mi caso fue así, pero también un sentimiento profundo que hundía sus raíces en el amor a mi pueblo, trayendo a la memoria, como hoy, mis vivencias infantiles, el baile en la plaza, los juegos y esa fiesta que era largamente esperada de año en año, cuando las oportunidades de diversión eran bien escasas. Un año más no puedo pasar estos días en Ojén como me hubiera gustado, pero vivo en la distancia el bullicio de mis paisanos, a quienes deseo una feliz feria.

19 comentarios:

  1. No se porqué los días de fiesta en el pueblo son siempre nostálgicos por muy a gusto que te encuentres en otro lugar.

    Un beso

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    1. Seguramente porque nos saben a poco y quisiéramos que el ciclo de espera no fuera tan largo.
      Besos

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  2. Hola Francisco...muy bueno el pregón, con un mensaje concreto y musical...también me gustó conocer parte de la cultura del lugar donde has crecido. Siempre es un gusto leerte. Recibe un fuerte abrazo.

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    1. No es lo que digo o cómo lo digo, sino la forma de oírme la que hace musical mis palabras.
      Un abrazo

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  3. Hola amigo, bello lo que compartes. Me gustan las ferias, de niña siempre iba a todas las de mi pueblito natal, .... Cuidate.

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    1. Yo en cambio no soy muy amante de la feria, pero la de mi pueblo me puede y me tiene durante todos estos días pendiente de ella.
      Abrazos

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  4. Es lógico que tu sentimiento y tu alma esté en Ojén, en tu pueblo, aunque físicamente no puedas estar. A mí me pasa lo mismo con el mío, Francisco: la nostalgia o la melancolía... Abrazos cordiales.

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    1. Tengo otras rarezas, Paco, pero este sentimiento pueblerino sé que es común a muchas personas, por eso me atrevo a exteriorizarlo.
      Abrazos

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  5. Te entiendo, yo casi siempre "estoy" en Nueva Carteya a pesar de estar en Córdoba, mucho más en las fiestas.

    Un abrazo Fco.

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    1. Nos podíamos pasear de la mano y hablar de nuestras nostalgias pueblerinas, ¿no te parece?
      Un abrazo

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  6. Puedes con todo y lo haces muy bien, Francisco.
    Un abrazo

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    1. Entonces debo ser un todo terreno, Antorelo. No tanto, esa es tu forma de mirarme.
      Un abrazo

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  7. Gracias Francisco por acercarnos una vez más a tu querido Ojén, un precioso pueblo al que rindes siempre tu mejor homenaje. Un pregón sublime.
    Un abrazo

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    1. Hoy no haría el mismo pregón, si bien hay un poso de vivencias que son inamovibles a mi memoria. Gracias por tu apreciación.
      Abrazos

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    2. Hola Francisco soy sobrino de tu hermana Isabelita y Paco, vivo en Sevilla mi correo es clauped@gmail.com, hijo de Paca la Chato que estudiamos en Madrid. Vivimos en C/ Sierpes, 46 - Me gustaria ponerme en contacto trabajo en el Ayto de Coria un saludo Pedro. mi tfno 656582701

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  8. Y te acuerdas de esa Virgen del Pilar que nos unió???? Besos primo!!!
    y una feliz feria aunque este año tampoco puedas asistir.

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    1. Por supuesto que sí que la recuerdo. Este verano, cuando estuve allí, me acerqué a ella y te hice presente. No puedo olvidar que ha sido ella quien nos ha unido.
      Besos

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  9. Se nota que llevas el pueblo de Ojén en las venas. Espero que tus paisanos disfruten de la feria.
    Saludos.

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    1. Tengo la suerte que mis paisanos me reconocen como ojeneto de pro que, en su sencillez, hace y dice cuanto puede de su pueblo.
      Un abrazo

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