24 marzo 2016

SANTA MARÍA DE LA ESPERANZA MACARENA



Lluvia de pétalos a su paso,
velas rizadas, sonrisa apagada
en su aniñada cara serena
y un leve temblor esmeralda en el pecho.

El barrio te dio tu nombre
y tú a ellos les devuelves,
─en halo que incienso inhala─
la alegría y la esperanza.
Eres oración en Sor Ángela,
fiesta en Feria
y jolgorio vecinal en calle Parra.

Seduces a quien te mira
cuando tus ojos le clavas licuándole
las dudas y salificando su fe;
dibujas emoción en quien te mira
y a genuflexión invitas
a quien se viste de incertidumbre.

Eres la Madre de Dios y para el pueblo
Esperanza…    Esperanza Macarena.
Eres… Eres amor derramado, consuelo del triste
y mano tendida para los corazones
endurecidos por las cicatrices de la vida;
ayúdanos a vivir el Triduo Pascual definitivo:
intercede por nosotros ante tu Hijo,
tu bendito Hijo, el único que salva.

3 comentarios:

  1. La Esperanza Macarena me trae tan buenos recuerdos... Supe que estaba embarazada en un viaje a Sevilla y le pedí que todo fuese bien.
    Gran poema, como siempre.
    Abrazo!

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    1. No imaginaba ese vínculo de tu embarazo con la ciudad, Zamarat. Estoy a 10 minutos a pie de la Basílica Macarena, así que cuando quieras algo para ella me lo encargas y yo me ocupo.

      Dos besos, uno a tu chiquitín que ya no lo es tanto.

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