13 diciembre 2015

LA NOCHE ES UN INTERROGATORIO



¿Soy yo acaso el guardián de mi hermano?
(Gn 4, 9)

Ha caído la noche
como se derrama un tintero
y deja tras de sí una mácula indeleble
que se esparce hacia el poniente
rasgando el velo inmaculado
de lo que fue luz radiante y luego adormecida
y ahora es mortecina sombra inquietante.
La noche es un interrogatorio
que nos apresa entre las sábanas
y la losa dura de la almohada,
robándonos el descanso
y desbocando el corcel
que galopa agitado en el tórax.
En el volátil cuaderno no escrito
de la memoria, los renglones torcidos,
los borrones y las tachaduras
de lo acaecido que ahora se rebela
aduciendo pruebas en contra;
mientras el fiscal hiere con dardos verbales
que saben tejer el laberinto
del que es difícil escapar indemne.
¿Acaso soy el guardián de mi hermano?

30 comentarios:

  1. Qué fuerte ! ¡qué crudo ! y qué real ! suele pasar . Hay noches que son un calvario pero si algo conozco tu corazón lo que te deja sin dormir tiene que ver con algún nadie. Haces lo que puedes y más. Dios todo lo ve. No te lo tengo que decir yo.
    Me parece que cuando partamos, nadie va a exigirnos más de lo que podemos.
    ¿"Acaso soy el guardián de mi hermano ?" hasta cierto punto españolito.
    No más.
    Apapachos.

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    1. No dejo de ser corriente y moliente, nada extraordinario. He pretendido, apoyado en la defensa de Caín, analizar cómo no nos responsabilizamos de nada de cuanto sucede a nuestro alrededor; aunque nuestra actitud no deja de soplarnos al oído lo que está bien y lo que está mal.

      Apapachos.

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  2. No debemos cargar con la culpabilidad que tantas veces sentimos pensando que podíamos haber hecho mas, pues en ese momento creímos que era lo correcto.Todo eso puede valernos para en el futuro meditar con paciencia y no precipitarnos.Un abrazo

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    1. Si los remordimientos no nos sirve para cambiar, sino para pasar una mala noche, vano es el intento. Lo ideal sería averiguar qué es lo correcto y en adelante optar por esa vía.

      Un abrazo.

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  3. Ay la noche...
    Le temo como una vara verde,no sólo por mí sino por rodos loa que ocupan mi mente.
    ien puesto el título de la entrada.
    Besos

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    1. Hace mucho que no había oído lo de la vara verde. Muchas gracias, Tracy.

      Besos.

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  4. Cuando la conciencia muerde, hace mucho daño, sí, aunque tú lo expresas mejor en estos versos profundos, casi trágicos.
    Un placer leerte, Francisco.

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    1. Es un honor y un placer ser agasajado con tus palabras, Isabel.

      Besos.

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  5. Desde luego, hay muchas noches que pueden ser infernales...
    Abrazo!

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    1. Espero que todas tus malas noches sean producto de una leve indisposición de tu pequeño, tus cinco sentidos.

      Besos.

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  6. hijo de Cain??? pagamos su culpa hasta el fin...

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    1. No debe nadie pagar culpas ajenas, pero sí ser responsables de sus actos.

      Un abrazo.

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  7. Por suerte siempre amanece y lo que se ve torcido de noche se endereza.

    Saludos

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    1. Esto es una verdad incuestionable: lo mismo que la llegada de la noche nos invita a la introspección, el amanecer nos hace ver las cosas con menos pesimismo.

      Un abrazo.

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  8. A veces cárcel, otras... el cielo.
    Un saludo, Paco.

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    1. La conciencia es como un funambulismo, siempre en equilibrio inestable.

      Un abrazo.

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  9. Tengo una reticencia a dormir desde que soy un niño, tal vez sea una culpa ancestral que me persigue. Perdón, fui autorreferencial.
    Este escrito me llegó.
    Un fuerte abrazo, Francisco.
    HD

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    1. Hola humberto: que tengas presentaciones de éxito de tu nuevo libro. Ya sabes, cuando vayas a venir a Sevilla me avisas y nos vemos.

      Un abrazo.

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  10. Yo, le temo a esas noches de insomnio en las que le das vueltas a las cosas y piensas en que todo lo has hecho mal. Menos mal que cuando amanece se ve todo distinto.
    Un abrazo.

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    1. Suele ser así, Josefa, que el amanecer descorre las cortinas y reina de nuevo la luz.

      Un abrazo

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  11. La conciencia adormecida se despierte en la obscuridad de la noche, es el momento de examinar la conciencia y reconocer todos los errores cometidos a lo largo del día.

    Besos

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    1. Así suele ser, que llegado el momento del descanso, se hace repaso de toda la jornada y de aquellas cosas que nos preocupan.

      Besos.

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  12. Una realidad muy dura, como esa almohada de alguien cautivo.
    Un fuerte abrazo de anís, gran poeta.

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    1. La almohada, Sara, se convierte a veces en una losa absolutamente incómoda.

      Besos anisados.

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  13. Lo mejor para pasar una buena noche es tener la conciencia limpia y tranquila.

    Abrazos.

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  14. Hola Francisco, creo tener mi conciencia tranquila, pero la noche y yo no somos muy amigas, estoy deseando que llegue el día y los "miedos" desaparezcan.

    Besos.

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    1. Eso que te sucede es más frecuente de lo que uno imagina cuando está desvelado, pero no quiere decir que sea por mor de tu conciencia. Es un trastorno que causa estragos y que tiene algún tratamiento médico, así que no lo dejes.

      Un abrazo inmenso y un beso.

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  15. La noche saca a la conciencia de su letargo, de su cómodo asilo voluntario-o no-para abrirle los ojos, esos que viven dentro ciegos muchas veces a la realidad.
    Y nos destroza...
    Más besos.

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