Cae la tarde. De repente, un
retoño,
una brizna de esperanza,
una percha de la que colgar
los nuevos anhelos
y verlos crecer
subiéndose por las pareces
de la búsqueda como las
yedras.
Una palabra rompe el
silencio
y se hace armonía en su
propio eco;
y se acoda, y se acomoda
en los oídos que escuchan
y en los aires ciegos,
mientras el aire se esponja
de esperanza.
Cae la tarde, cruza el aire
un vencejo
vistiendo de acrobacias
la monotonía de este
atardecer caluroso
donde sólo pasan las horas,
junto a caminantes anónimos
que solo aportan silencio recóndito.
Retomo el libro, regreso a
la lectura
y un silabeo fónico
se hace música en mis
labios.
Cae la tarde, pero tarde. Mientras no haga calor es llevadero.
ResponderEliminarUn abrazo, Paco.
Esta madrugada he despertado empapado en sudor. O soy yo o es el verano el que tiene el termostato averiado.
EliminarUn abrazo, Cayetano.
Por vezes é tão belo e suave o cair da noite. Poema muito sedutor.
ResponderEliminar.
Cumprimentos
Muchas gracias, Rykardo.
EliminarCumprimentos.
La lectura, compañera que hace volar nuestra fantasía. Un abrazo
ResponderEliminarEs verdad que hay un mucho de fantasía en el poema. Gracias, Antorelo.
EliminarUn abrazo.
La tarde, la palabra, un eco,un anhelo, la música, un libro--- Un ambiente ideal para mi, expresado con tus hermosos versos, siempre llenos de calidad y mensaje.
ResponderEliminarGracias por tan delicadas palabras, Chela.
EliminarUn abrazo.
eres poeta
ResponderEliminarMuchas gracias por decírmelo. Suena muy bien.
EliminarUn abrazo.
Hola Francisco. Qué bonito es leer un libro mientra se escucha música o el piar de los pajarillos, o se oye al fondo el sonido de la mar.
ResponderEliminarBellos versos y placida lectura.
Abrazos
Todas esas situaciones son maravillosas con un libro entre las manos, Isa.
EliminarAbrazos.
Una forma hermosa de expresar esa caída de la tarde.Saludos
ResponderEliminarGracias, Charo, es un momento que está presidido por la luz en su retirada y por tanto mágico.
EliminarUn abrazo.
Muchas gracias por tus palabras, Agnieszka.
ResponderEliminarMuy bien descrita esa caída de la tarde. Es el momento mejor del día y el que prefiero para fotografiar.
ResponderEliminarBesos
Esos momentos tiene una calidez muy especial, querida amiga.
EliminarBesos. 💋
Una tarde de verano tranquila y digna de reflexión y lectura, que tú le das voz y esperanza, Francisco. Vamos a estrena pronto julio, ojalá se porte debidamente y no tengamos sorpresas, Dios quiera que sea bueno.
ResponderEliminarMi abrazo y feliz fin de semana.
Gracias, María Jesús. Siempre tan cordial conmigo.
EliminarUn fuerte abrazo.
La monotonía des día a día al caer el sol...
ResponderEliminarUna monotonía de la apariencia y la diversidad en los pormenores: siempre igual, siempre distinto.
EliminarUn abrazo.
Cae la tarde y tus versos son preciosos, saludos amigo Francisco.
ResponderEliminarTú sí que eres preciosa, Sandra.
EliminarUn abrazo.
Mil gracias, Sandra.
EliminarBuenos versos moldes de inyección de plástico
ResponderEliminarNo hay moldes, José, lo prometo; tan solo artesanía y constancia.
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