01 julio 2012

CREPÚSCULO EN COSTA BALLENA


A Encarni Cebrián, mi amiga, mi hermana.


Se echa el viento,
se echa la tarde y se vislumbra la noche
con su manto pardo
sembrando inquietudes
y desasosiegos:
la noche es un choque tectónico
entre la calma y el reposo
por la agitación de lo incógnito.
Un pájaro sobrevuela los tules grises
que antes fueron añil y turquesa,
y, allá al fondo, se incendia el sol
—batiéndose en retirada—
mientras se acunan los bostezos del sueño;
se enmudece el jardín y despierta
la dama de noche
con su aroma envolvente
y empalagoso en la cercanía;
allá, a lo lejos,
el murmullo del mar
emulsionando incesantes idas y venidas
con bordados de nácar
y sobrenadan crestas afestonadas y cantarinas;
una brisa ligera mece las hojas
de las palmeras en lo inmediato
y concierta pianos trinos
que ya se adormecían;
canta un grillo bajo el farol
y pronto se enmudece.
A poco, todo es ausencia,
plácida somnolencia de la vida en retirada
para descansar  —en apariencia—
hasta el nuevo amanecer.

7 comentarios:

  1. Paz, tu poema me inspira mucha paz, la del final del día con su descanso, la paz del sueño y la paz del amor sosegado, bonito y apacible es tu poema
    feliz domingo

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  2. Al menos está la esperanza de un nuevo amanecer, y tantos otros, si son como los describes, que sean millones.

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  3. Asi son las mayoría de las noches cuando no caes en estado cataléptico por el cansancio. Si no la mente no descansa y percibes los ruidos de la noche.
    Estoy segura que si alguien me leyera estos bellos versos me dormiría enseguida.
    Bss

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  4. Conocí esa playa de Costa Ballena cuando aún era virgen, sin edificios, ésa y la de las Tres Piedras.

    No se puede contar más bonito un anochecer, una noche.

    Un abrazo Francisco.

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  5. Qué bonito lo pintas, que quietud ... leer tu poema es sentirlo.

    Feliz domingo!!

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  6. hermosa, como todas tus poesías

    besos!!

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  7. Preciosa la foto y muy bello el poema.
    La noche y la libertad del descanso, de los sueños, de la paz del silencio. Del sol apagado y del tintineo de estrellas alumbrando como farolillos en el firmamento. La noche es del silencio, de las estrellas y la luna, de la paz muda.
    Después de la noche llega un nuevo día, una nueva esperanza o una nueva desesperanza. Aun así el sol seguira brillando.
    Precioso el poema que has escrito Paco.
    Saludos y un abrazo grandeeeeee

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