14 abril 2011

DESCANSE EN PAZ DON ALFONSO

Fue en segundo de bachiller cuando me entusiasmaron las clases de don Alfonso. Era un apasionado de la historia, pero también de la geografía. Debía comprender que el atlas era insuficiente para que aquellos jóvenes de 12 años pudiéramos formularnos una idea clara de la situación de cada uno de los accidentes geográficos, sería por eso que apoyaba sus clases, siempre que podía, con proyecciones de diapositivas. Lo que don Alfonso transmitía no tenía más remedio que ser interesantísimo, a juzgar por la pasión que ponía en cada una de sus clases.


Anoche recibí un correo de un viejo compañero de instituto informándome del fallecimiento de don Alfonso. Debía rondar los 80, no más. Una vida entregada a la docencia, a su enriquecimiento cultural y a la literatura, pasión que descubrió con el correr de los años. Hoy jueves, a las 12, recibirá cristiana sepultura en Marbella, donde llegó recién acabada su licenciatura y se afincó para siempre. Descanse en paz.

Lo recuerdo un tanto rubicundo, más bien pelirrojo, piel clara y pecosa, un ligero tic facial, chaqueta cruzada con corbata que quedaba desapercibida en el clasicismo de su indumentaria y un amor desbordante por las materias que impartía. Había llegado soltero, como también la profesora de física y química con quien se desposó años más tarde. No es el primero de los profesores de aquel tiempo que se han ido para siempre, tampoco el único por el que he sentido un afecto que no ha desdibujado el tiempo, pero hoy es don Alfonso el motivo de mi pesar y el de la oración que ahora elevo en su memoria. Descanse en paz.

11 comentarios:

  1. Francisco, tu entrada de hoy rezuma un sentido afecto hacia tu viejo profesor. Ello te honra, como no podía ser menos. Un saludo

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  2. Todos tenemos en el recuerdo algún profesor que nos marcó para siempre.
    Este texto tan emotivo sirve para rendirle un sentido homenaje a D.Alfonso.

    Un beso.

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  3. Querido Francisco.el recuerdo de nuestros más queridos maesros, nos siguen por y para siempre aferrados a nuetros más prfundo sentimiento.
    El homenaje a D. Alfonso en tu post, es una oración para el descanso de su alma y denuestra lo mucho que le apreciaste. Me uno a ella pidiendo a Dios que vele por él.
    Un fuerte abrazo: Juliana

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  4. Los buenos alumnos son los que recuerdan con cariño a los buenos profesores.
    Un saludo.

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  5. Los profesores apasionados y que viven su profesión con intensidad son aquellos que nunca olvidamos. Muchos de ellos nos han hecho persona. Descanse en paz ese hombreque tanta curiosidad le despertó, Don Francisco. Un abrazo.

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  6. Hay personas que dejan huella en el alma, y siempre que uno se va, algo de nosotros se va con él. Yo también he perdido algunos profesores muy queridos, que me han ayudado a ser lo que soy. Y mi gratitud hacia ellos estará en el corazón mientras esé entre los vivos.
    Un beso

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  7. Cuando un profesor deja huella es que ha sido bueno en su trabajo haciendo que los estudiantes tengan ganas de seguir avanzando. Tu recuerdo hace ver que era de los que lo merecen . Besos

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  8. Querido compañero: Me reafirmo en todo lo escrito por tí, sobre nuestro queridisimo profesor de Geografía e Historia. Era tan buen profesor y, sobre todo tan enamorado de su profesión, la enseñanza, que aún de vacaciones seguía pensando en sus alumnos del Instituto Laboral de Marbella, hacía diapositivas de todo lo que tuviese relación con su materia, luego nos la proyectaba y explicaba perfectamente, era un gozo para sus alumnos, entre los que hemos tenido la suerte de encontrarnos. He acompañado a Dª Pepita, y también muchos compañeros de aquella época. D.E.P. el gran profesor D. Alfonso

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  9. Qué bonito recuerdo para un profesor, alguien que hace nuestros horizontes más anchos.

    Todos tendremos que irnos, es un triunfo poder hacerlo dejando tan gratos recuerdos en tanta gente.

    Saludos, compañero.

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  10. No tengo mucho más que añadir a todo lo que has dicho tú y tus otros comentaristas.
    Además es que me lo estoy imaginando...

    Descanse en paz Don Alfonso!

    Un abrazo!
    ;)

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  11. Descanse en paz. Que maravillosos recuerdos los de esos abnegados maestros que se entregaban en cuerpo y almaa impartir conocimientos. Cuanta ayuda nos brindaron. Aunque no lo conozco, también siento su partida.
    Un abrazo Francisco

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