23 junio 2025

RECONOCIMIENTO

 




Vino a ser un reconocimiento

casi póstumo,

cuando ni siquiera él

tenía capacidad de reconocerse.

Sonó un discurso hueco,

escrito por la mano ajena

de un oscuro secretario,

y le siguió la banda

con acordes estridentes de bombo y platillos.


A los dos días

se habían marchitado las rosas y el laurel

y los paseantes no identificaban

el monolito con la soledad creadora.


Como de costumbre,

el homenaje llegó en las postrimerías,

cuando casi era acta de defunción

y se había acomodado en el olvido.

22 junio 2025

EN LO OSCURO

 




En lo oscuro,

al otro lado de la ventana,

trabado o no entre las ramas,

una trama que tiene

vestiduras talares de mentira,

tal vez ficción que amedranta e intimida.


Todos los miedos se entretejen

en la oscura madrugada,

desportillan el sueño

y te nombran una dilatada imaginaria

que, ni te toca,

ni estabas en condiciones de hacerla.


Signos grotescos. Imágenes deformadas

y una realidad biselada que da el pego.

Es la entrada de un túnel,

una terrible y oscura boca de lobo

que se agiganta con los ojos cerrados;

un vacío causado por hielo que quema,

sudoración profusa y temblores:

la ficción hecha pálpito angustiante.


21 junio 2025

VOLVER

 




Paisaje vivido, añorado:

infancia, despertar a la juventud,

pies ágiles que no conocían la fatiga.


Como cambia el caserío

hostigado por la ambición especulativa,

tampoco vuelve uno

siendo el mismo.

Quien se ausentó, conoció y vivió

otras realidades,

se le adosan capas superpuestas

que se le han sobredimensionado.


Volver

no es una página en blanco,

mas tampoco un dictado

con sus correcciones en rojo,

es regresar al origen

y palpar las nuevas realidades

con huellas del polvo de los caminos.


Y repentinamente, las ausencias,

el filo de la guadaña

que segó gavillas y dejó rastrojos

en lo inmaculado de su horizonte.


Volver: recordar, revivir, recontar

y también agregar nuevos sumandos

a la nueva realidad.

20 junio 2025

CORRUPCIÓN

 




A la virtud la asecha y acosa la noche

con toda una baraja de encartes

capaces de rendir la pureza de espíritu.


Aunque no se explicita,

es el dinero quien toma la iniciativa

y termina por domeñar el pulso

y provocar el vómito

al más puro manantial de agua cristalina.


No es imprescindible contar

con renacuajos sobrenadando el lodo,

sino provocar la sed

y deslumbrar con los destellos

del metal brillante y sonante,

con la pulcritud del metálico

y repartir migajas a los lugartenientes.


Yo mismo, en un pretérito anterior,

en el que se manejaban las rubias

fui tentado con medio potosí y sentí miedo,

porque estaban decididos a convencerme.


¡Qué frío es el dinero nocturno

y qué frágil el cristal de la honestidad,

cómo se raya con la luz y deja

una pestilente mácula para siempre!


El reloj de la vida surca un cauce natural,

pero cuando se desvirtúa,

no hay cuerda ni pilas que le lleve

con precisión a la meta soñada.

19 junio 2025

UN MANTO DE SILENCIO

 




Te has ido a vivir a las estrellas, Luis,

envuelto en un manto de silencio,

como quien se atrinchera

de las inclemencias

y se queda anudando sombras.


Una orfandad de mutismo

fue tu recogimiento profundo,

cuando has dejado de ser donación

con la prodigalidad acostumbrada.


No hemos aprendido de ti

el lenguaje leguleyo,

pero tratamos de imitarte

con la sobriedad y el rigor de tu entrega

y la sonrisa afable y cariñosa

de cada uno de tus gestos.


Si algo se nos ha contagiado,

ha sido la alegría de repartir amor

a quienes solo cuentan

con la calderilla de una sonrisa agradecida.


Ahora que vives en la plenitud

de la Presencia,

nos fundimos contigo

en un silencioso abrazo.

18 junio 2025

EQUIPO DE GIMNASTAS

 




Esta tristeza de cuerpo,

estas adiposidades

sobrevenidas con el calendario,

y las limitaciones como rémora

que van acelerando el reloj de la vida.

Esta rigidez de las articulaciones

y el figurín olvidado de antaño

que duerme en las fotos que nos acusan,

por curvas nuevas que no nos pertenecen

y hasta dan vértigo.


Cuando quise reconocerme ante el espejo

me habían mordido la jovialidad:

ya no era el mismo

y me hacía recordar más al abuelo

que al nieto saltarín que había sido sepultado

tras los brocados áureos del marco.


Pero vino él, un pibe de ultramar,

enjuto y terso como caña de bambú,

fuerte y elástico,

y a base de música y ritmo

fue metiendo en cintura

los desbordamientos de los días ociosos.


Ahora, esto que fue anacronía,

sigue siendo belleza acomodada,

flexibilidad inusitada,

sonrisa que nace de lo confortable

y que se asoma al ayer,

para reconocer en el terso cuero

la piel flexible de ese cuerpo

que nos sigue perteneciendo de por vida.

17 junio 2025

UN DÍA MÁS

 




En el cuenco de mis manos

el espacio preciso para una naranja,

el tacto de mi padre

y también de mi abuelo.


¡Venid a mí un día más!


Dos cortes transversales,

dos casquetes polares

-norte y sur-

por donde se asoma su excitación

y el amor que me dilata.


¡Venid a mí un día más!


Un incierto número de longitudinales,

simulando los meridianos,

y poniendo en conexión a los polos,

por donde ya se derrama.


¡Venid a mí un día más!


Un torrente de exuberancia azucarada,

que chorrea por mis manos

y me reconcilia con la intimidad

de esta mirada hacia el ayer

que actualizo cada día,

según voy segregando los gajos.


¡Venid a mí un día más!